TRAIL SPEED ELITE

Ya en nuestras manos y fuera de su envoltorio original, es el momento de analizar al detalle todos los aspectos del Trail Speed Elite. Nos sorprende en un primer momento el reducido tamaño y la ligereza de su sistema de iluminación propiamente dicho. Se trata de un sistema que alberga dos LEDs y que tiene unas dimensiones realmente reducidas tratándose de un frontal con una potencia de 660 lumenes. El peso de este elemento está en consonancia con su reducido tamaño, y es que con 62gr de peso puede considerarse como realmente liviano.
El frontal viene alimentado por una batería de dimensiones considerables, y un peso de, aproximadamente 120gr (incluyendo la funda protectora). Esta batería la podemos anclar a la cinta en la parte posterior de la cabeza, aunque mucho nos tememos que no será el lugar ideal para transportar la batería mientras corremos... Pero Silva ya se ha anticipado a nuestros pensamientos y nos ofrece un cable alargador, con el cual podremos decidir dónde colocar la batería para que nos moleste y podamos correr con total naturalidad. Así pues, con el cable alargador, nosotros decidimos donde más nos conviene llevar la batería, en el bolsillo de un pantalón, en el bolsillo del cinturón de hidratación o directamente dentro de la mochila. De esta manera conseguiremos liberarnos de un peso considerable en la cabeza, ganando en comodidad y confort en carrera, este hecho creemos que nos permitirá afrontar con garantías una noche entera con él, convirtiéndose de esta manera en firme candidato a ser elegido para Ultra distancias.
El grosor de la cinta de la cabeza es generoso y cómodo, viene con una goma siliconada por el interior para evitar, en la medida de lo posible, el balanceo de la cinta mientras corremos. La goma la podemos ajustar fácilmente para adaptarla al perímetro de nuestra cabeza y asegurarnos así una perfecta sujeción. También podremos desmontar todo el sistema para poder realizar un lavado de la goma en caso de ser necesario.
El peso de todo el conjunto, incluyendo el frontal, la cinta de la cabeza, la batería y el cable alargador hace un total de 247gr. Una cifra que no nos parece desmesurada, dadas sus características técnicas y la gran capacidad lumínica que nos ofrece.
El Silva Trail Speed Elite tiene un grado de protección frente a salpicaduras equivalente a IPX6, el cual debería ser capaz de resistir chorros muy potentes de agua. Este índice de protección convierte al Silva Trail Speed Elite en nuestro compañero perfecto en las noches de tormenta, debido a su alto grado de estanqueidad, aunque debemos tener en consideración que el índice IPX6 no permite que sea sumergible al agua.

Directamente desde Suecia nos llega un nuevo frontal de la casa Silva. Una empresa que empezó su andadura allá por el 1933 construyendo una brújula de gran precisión y un frontal que abría un nuevo horizonte dentro del mundo Outdoor. A base de productos de gran precisión y calidad se han ganado una merecida fama dentro del mundo de la orientación y de la iluminación nocturna.
Anteriormente en la redacción de TRR habíamos probado y analizado el versátil Trail Runner II USB, con resultados satisfactorios. Llega ahora el momento de evaluar las características y el rendimiento de su hermano mayor, el Silva Trail Speed Elite. Un frontal que por prestaciones y características técnicas está destinado a convertirse en un auténtico “number one” dentro de los rankings de sistemas de iluminación para Trail Running. Y es que, gracias a los 660 lúmenes de intensidad va a ser de lo más potente que vamos a encontrar en el mercado destinado al Trail Running.
Debemos puntualizar que, el Trail Speed Elite de Silva ha sido la elección personal de la campeonísma Núria Picas para afrontar sus últimos Ultras y la verdad, no le ha ido nada mal. Será una de las claves de su éxito la buena iluminación nocturna y la posibilidad de mantener ritmos elevados durante la noche?

En este apartado debemos distinguir las dos modalidades en las que podemos utilizar el Trail Speed Elite. Con la petaca anclada en la cinta de la cabeza en su zona posterior y mediante el alargador y la petaca transportada en algún otro lugar que más nos convenga.
La primera de las opciones, con la petaca anclada en la parte posterior de la cinta, debemos decir que no nos ha terminado de convencer, pues para que todo el sistema se mantenga correctamente ajustado en su sitio durante toda la salida, deberemos tensar mucho la cinta elástica, con el inconveniente de crear presiones excesivas en la parte de la frente que está en contacto con la pieza de plástico que sujeta el frontal. Estas presiones excesivas se podrían haber evitado, en cierta manera, si la pieza de plástico rígido que sujeta el frontal, se hubiera forrado en la parte interna con algún tipo de espuma o material blando que permitiera una mejor adaptación de la placa de plástico con la frente del corredor. Para que esta opción fuera realmente factible y cómoda se debería haber añadido una cinta que cruce la cabeza transversalmente y así no depender tanto de la presión ejercida por la cinta lateral a la hora de fijar tanto el frontal como la batería. Aun y así, creemos que esta opción sólo puede ser válida para salidas cortas o caminadas por la montaña en zonas oscuras, así cómo para realizar tareas que requieran poco movimiento ya sea plantar una tienda, moverse por un albergue de noche, cocinar con el hornillo en la oscuridad...
La segunda opción, corresponde a utilizar el cable alargador que viene de serie con otros accesorios. Mucho más acertada esta segunda opción, que nos permite configurar el sistema como mejor nos convenga en función de la salida. Nosotros nos sentimos muy, muy cómodos llevando la batería en el bolsillo lateral de una malla de compresión y pasando el alargador de cable por el interior de la camiseta, pero existen otras muchas opciones que nos han gustado igualmente, cómo por ejemplo introducir la batería dentro de uno de los bolsillos de un cinturón de hidratación o directamente dentro de la mochila. Esta opción de utilizar el cable alargador nos permite sacarnos un peso importante de la zona del cráneo y llevarlo en otra zona, produciendo una mejora importante de la comodidad en marcha.
El frontal tiene muy buenos niveles de regulación en cuanto al ángulo de ataque de la luz. No tiene posiciones fijas marcadas, sino que podemos regularlo con suma facilidad mediante un movimiento suave y preciso de la bisagra frontal.
La intensidad del Silva Trail Speed elita, también es regulable en cuatro posiciones. Inicialmente se coloca a la máxima intensidad, que corresponde a los nada despreciable 660 lúmenes, sólo con darle un toque al intuitivo botón disminuimos la intensidad a un 60% aproximadamente. Si le damos otra vez al botón, pasaremos a la tercera intensidad, que se verá disminuida aproximadamente al 40% y en el que sólo se utilizará uno de los dos LEDs de los que consta el frontal. También dispone de una opción de iluminación a ráfagas o de emergencia.

En esta sección trataremos de evaluar el resultado obtenido con el Trail Speed Elite en nuestro día a día, o mejor dicho, en nuestra noche a noche. Podemos deciros que esperábamos mucho de los 660 lúmenes anunciados en el catálogo de Silva pero la realidad, en este caso, ha superado con creces nuestras expectativas. La primera prueba que realizamos con el frontal, esperamos pacientemente a que se hiciera completamente de noche en los alrededores del lago de las Builloses en Francia, en una zona de media montaña, lejos de cualquier gran urbe y sin contaminación lumínica en el ambiente. Por no haber, no había ni luna que nos acompañara para facilitarnos nuestro desplazamiento nocturno... cuando llegó el momento de darle al botón de encendido del Trail Speed Elite... buff!! Literalmente se nos hizo de día delante nuestro! Una gran sonrisa se dibujó en nuestros labios, cómo aquel gran super-héroe que se sabe poseedor de una arma indestructible! En aquel justo instante supimos que por muy oscuro que se hiciera, con el Trail Speed Elite en nuestro poder, nuestro ritmo podría llegar a ser exactamente el mismo que si corriéramos a plena luz del día.
Realmente la capacidad de iluminación a la máxima potencia y la definición nítida del terreno que nos ofrece son excelentes. Los 660 lúmenes, unidos al sistema Silva Intelligent Light, nos proporciona una áurea de luz delante nuestro que nos da una confianza muy grande a la hora de avanzar con rapidez por el bosque y los terrenos montañosos. El funcionamento del Silva Intelligent Licht es sencillo pero efectivo, combina los dos tipos de iluminación a los que estamos acostumbrados en los frontales, amplitud lumínica y profundidad en la iluminación. En este caso lo combina en las intensidades alta y media, proporcionándonos un entorno lumínico muy amplio y profundo al mismo tiempo que nos evitará de ir realizando movimientos de balanceo con la cabeza para tener que visualizar nuestro entorno más cercano... para que nos entendamos, es como si en el coche lleváramos las luces cruce y las largas permanentemente.
En el catálogo nos aseguran una luminosidad de un alcance de 90m, aunque nosotros consideramos que para un frontal de Trail running lo más importante son las primeros 40-50m, es aquí dónde el Trail Speed Elite nos abre el camino y nos permite anticipar nuestras zancadas a los obstáculos del terreno, facilitándonos de este modo el mantenimiento de una velocidad de crucero francamente elevada, ya que gozaremos de una distancia de reacción suficiente para afrontar todas las dificultades que nos podamos encontrar en el camino.
Cuando nos ponemos en marcha, la opción de configuración con la que nos hemos sentido más cómodos, ha sido utilizando el cable alargador para así liberarnos de los 120gr de peso de la batería en la cabeza. De esta manera tenemos la opción de elegir dónde queremos transportar la batería, ya sea en el bolsillo de alguna malla compresiva, en el cinturón de hidratación o en nuestra mochila favorita.
La facilidad de uso y el hecho que con un único botón de tamaño considerable podamos accionar los tres niveles de intensidad, así como las opciones de encendido y apagado, hace que incluso utilizando guantes sea muy fácil e intuitiva la acción de pulsar el botón. También se convierte en acción fácil y sencilla el cambio de batería mediante un fácil conector que nos permite empalmar y desempalmar los cables con suma facilidad.
Evidentemente el Trail Speed Elite no se puede considerar como un frontal minimalista, aun y así el reducido tamaño del frontal de iluminación consideramos que plegado ocupará muy poco espacio en nuestra mochila o cinturón de hidratación.

En este apartado debemos destacar que el Silva Trail Speed Elite está pensado como un frontal multiactividades, y como tal, está pensado para ser utilizado en bicicleta, esquí, roller-skate, orientación, raids de aventura... Por eso dentro de la caja encontraremos dos accesorios que nos serán de gran utilidad para poder anclar la lámpara frontal al manillar de nuestra bicicleta y otro accesorio, que mediante un adhesivo de gran calidad nos permitirá fijar el frontal en cualquier tipo de casco.
Aunque no es nuestra misión evaluar las características para el uso en otras actividades, podemos decir que su uso más recomendado será en el ámbito del Trail Running, ya que en otras actividades los picos de velocidad que se consiguen son bastante más elevados y en tal caso, quizá 660 lúmenes pueden ser insuficientes para tener un total control de la situación.
En la caja también encontraremos el cargador de batería necesario para poder recargar la batería tantas veces como sea necesario.

El Trail Speed Elite de Silva está alimentado por una potente batería de Li-ion de 2,5Ah y 7,4v. La duración de la batería, según el fabricante, a la máxima potencia, es de aproximadamente 2,5h, mientras que a la mínima potencia la autonomía incrementará hasta las 10h.
Evidentemente, la utilización a la máxima potencia de este frontal tiene su limitación, y no es otra, que se fundirá, literalmente, la batería en dos horas y media, limitando de esta manera nuestra autonomía en carrera. De todas formas, si queremos sacarle el máximo provecho al Trail Speed Elite, debemos jugar con las intensidades de iluminación, utilizando en las subidas más lentas o en las zonas llanas y de baja dificultad técnica la posición intermedia o la más baja, alargando considerablemente la autonomía del Silva. Si racionalizamos correctamente la utilización de las intensidades del frontal, deberíamos ser capaces de tener iluminación durante una noche entera, con la cual cosa, el Trail Speed Elite nos da suficientes garantías para afrontar el tramo nocturno de cualquier Ultra que nos planteemos. Debemos decir que con la intensidad media o baja, los Trail runners podremos realizar nuestros recorridos favoritos sin ningún tipo de problema, ya que ofrece más y mejor luz que la mayoría de frontales que existen en el mercado.
En este apartado hemos echado en falta un indicador permanente del nivel de batería restante en forma de pequeño led como en algunos modelos de la competencia. El único indicador que nos ofrece el Trail Speed Elite para indicarnos su nivel de batería baja, es el de un parpadeo intermitente cuando lo encendemos o estamos en orden de marcha, indicándonos que queda un 20% de la batería.
Para los que tenéis pensado abusar del modo de máxima potencia durante un buen periodo de tiempo y tenéis miedo de quedaros sin batería en medio de la noche, la casa Silva, nos ofrece la posibilidad de adquirir una batería extra, que podremos cargar con nosotros y así doblar la autonomía del Trail Speed Elite.

Después de semanas de uso del Trail Speed Elite, estamos convencidos que nos encontramos delante del “FRONTAL”, en mayúsculas!. Pocos frontales serán capaces de hacerle sombra en la oscura noche al Trail Speed Elite de Silva. Ya no sólo hablamos de una potencia lumínica aplastante para la práctica del Trail Running y una autonomía que nos permite afrontar toda una noche con garantías, hablamos también de un excepcional nivel de acabados, de una comodidad en marcha que pocas veces hemos tenido con un frontal en nuestra cabeza, gracias en parte a su ligereza y a la posibilidad de decidir donde llevamos la batería en función de nuestras prioridades. Nos gusta también su polivalencia que amplía la abanico de actividades que podemos realizar con él, ya sea, Trail running, mountain bike, esquí de montaña o raids de avenbtura... Lo único que nos puede hacer dudar a la hora de adquirir este frontal es su elevado precio, ya que, sin duda los 250€ aproximados de coste es una suma considerable de dinero para invertir en material. Aun y así, su avanzada tecnología y nivel de sus acabados bien creemos que los vale.
Por lo tanto, la última decisión la tiene el usuario final. En nuestra opinión, si tienes como objetivo a corto o medio plazo la realización de algún Ultra en que parte del recorrido deberás afrontarlo de noche, si eres de los que realizas carreras nocturnas con asiduidad y no te gusta ver ralentizado tu ritmo en la noche por culpa del material, o bien, si eres de los que debido a los horarios personales te ves obligado a entrenar la mayor parte del tiempo a oscuras, estamos convencidos de que será una inversión de la que no te arrepentirás.
A nosotros el Silva Trail Speed Elite nos ha encandilado. Tanto nos ha gustado que más de un día, pudiendo salir con luz solar,nos hemos esperado a que se hiciera totalmente de oscuro para poder disfrutar a solas y en medio de la noche de nuestros recorridos favoritos.

Pros:
Gran potencia lumínica con 660 lúmenes
Gran autonomía de iluminación. Hasta 10h!
Ligereza del frontal en sí (62gr!)
Posibilidad albergar la batería donde mejor nos convenga con el alargo incorporado.
Accesorios para montar el frontal en el manillar de bici, casco...
Resistente a la lluvia y el agua

Contras:
Requiere de una inversión económica importante
Falta indicador permanente del nivel de batería