¿Qué zapatillas ganarán Zegama - Aizkorri 2022?
GALERÍA
DATOS TÉCNICOS
- Peso (Mujer / Hombre) 235 / 290 g
- Precio 119,99 €
- Drop 8 mm
- Peso corredor Medio
- Tipo terreno Polivalente
- Uso Media distancia
VÍDEO
CONCLUSIONES
Pros & Contras
PROS:
1. Muy versátiles: Sigue siendo un punto fuerte de las Sense Ride.
2. Sistema Optivibe: Ofrece una buena amortiguación y reactividad a la vez, que nos ha encantado.
3. Durabilidad: Mayor vida en todos los componentes.
CONTRAS:
1. Al tensar los cordones se sobreponen al bolsillo para guardarlos.
2. La zona del talón puede quedar holgada: Menos sujeción y se puede colar tierra.
3. Para lograr un ajuste correcto hay que perder algo de tiempo con los cordones.
Conclusiones
En esta nueva versión (y ya es la cuarta), las Salomon Sense Ride continúan siendo uno de los modelos de zapatillas para trail running más polivalentes que podamos encontrar. Al margen del destino o uso idóneo de las mismas, que tratamos de detallar en la review, debemos destacar ante todo que se trata de un calzado que es una garantía para prácticamente todo tipo de corredores.
La combinación de cualidades que son difíciles de aunar en un mismo modelo, hemos podido apreciarlas en las Salomon Sense Ride 4 de forma notable. Así, tenemos comodidad, sujeción, ligereza y buena amortiguación a partes iguales, dando como resultado unas zapatillas con las que hemos afrontado con éxito cualquier tipo de salida por la montaña, tanto en volumen de kilómetros como por tipo de terreno o ritmo de carrera. Aunque quedan al margen las superficies muy técnicas o específicas, como valoración global admitimos que los resultados obtenidos han sido incluso mejores a los esperados.
La fiabilidad mostrada ha supuesto correr con las Salomon Sense Ride 4 siempre de forma confiada y agradable. Buenas sensaciones para el corredor que debe dedicarse solamente a disfrutar de su actividad al aire libre. Además, en las salidas de más horas, el confort percibido se ha mantenido a lo largo de los kilómetros, retrasando de forma considerable la aparición de señales de cansancio y sobrecarga muscular en las piernas.
A la versatilidad indicada debemos añadir, si consideramos la resistencia y durabilidad de las zapatillas, que tenemos unas auténticas todo terreno en sentido literal. Es decir, las Salomon Sense Ride 4 son para (casi) todo y para todos, especialmente aquellos que no quieran tener más de un par de zapatillas para trail running.
REPORTAJES RELACIONADOS
REVIEW
Tipo de corredor
Tipo de corredor
Las Salomon Sense Ride 4 son, sin duda, las zapatillas más universales de la marca francesa y, posiblemente, una de las de mayor espectro del mercado, en cuanto a variedad de corredores destinatarios de las mismas.
Una equilibrada combinación de comodidad, estabilidad y protección, en unas zapatillas de peso contenido (son 290 gramos), a las que pueden sacarle partido corredores noveles o con poca técnica, que disponen solo de unas zapatillas de trail para todo, al igual que otros más experimentados y rápidos, quienes también necesitarán tener entre su arsenal un calzado cómodo para entrenos de volumen o no muy específicos.
Con un mesh más agradable y un interior bien diseñado, en el que no hemos tenido roce alguno, debemos destacar la lograda sujeción del pie, excelente en la zona media, gracias a la mayor estructura de esta cuarta versión de las Salomon Sense Ride. Si la describimos de abajo arriba, tenemos que la media suela sube por los lados, sujetando el pie y controlando que se desplace lateralmente en el interior de la zapatilla, después sigue el conocido Sensifit, que envuelve el pie hasta la zona del empeine, gracias a los nervios que encontramos en los laterales del upper (con mayor cuerpo que en versiones anteriores), y acabamos con los cordones, mediante el sistema Quicklace de Salomon, cerrando y sujetando la parte superior del pie. A todo ello debemos añadir la funda interna Endofit que, como si fuera un calcetín, cierra los laterales de la lengüeta cosidos hasta la plantilla.
El soporte descrito, junto a la buena amortiguación de las Salomon Sense Ride 4, hace que también los corredores de mayor peso encuentren en estas zapatillas una magnífica opción para todo tipo de salidas al trotar por el monte.
Debemos añadir, como ya hemos advertido en otras ocasiones, que, si queremos lograr un buen ajuste mediante el sistema Quicklace, será mejor que vayamos estirando los cordones por todos los pasadores, antes de fijar el tensor. Aunque no lo parezca, así podemos llegar a estirar hasta unos cinco centímetros más del cordón, incrementando la sujeción de forma considerable, siempre al gusto de cada uno. Eso sí, cuesta guardar el sobrante en el bolsillito que hay en la lengüeta, pues el cierre del Quicklace queda justo encima de su entrada.
Distancia
Distancia
Ya hemos destacado la comodidad otorgada por las Salomon Sense Ride 4, con un interior muy agradable y sin elementos rígidos molestos. Junto a una horma universal (tirando, más bien, a ancha), con espacio de sobra para la zona de los dedos, hemos podido correr largo sin perder las buenas sensaciones iniciales, pese al transcurso de horas y kilómetros: Ni una mayor carga muscular, rozaduras, ampollas o excesiva hinchazón de los pies han aparecido durante el periodo de pruebas.
Mención especial merece la zona del talón, en la que no encontramos el clásico collarín acolchado que bordea toda la parte alta de la zapatilla. Queda con menos estructura, más holgado, y como única protección tenemos un relleno en línea horizontal en cada lateral (parte interior y exterior) del tobillo, con un compuesto muy agradable, como el que tienen algunas zapatillas de la gama S-Lab. Con este cambio, a nivel de comodidad no se pierde nada, incluso resulta más confortable para el corredor, aunque sí penaliza algo en la sujeción de la zona del tobillo y deja más espacio, por el que se nos han colado más fácilmente piedrecitas y tierra al correr por terrenos descompuestos.
Al margen de lo anterior, y volviendo al tema de la distancia, encontramos varias características que son clave para que, decididamente, apostemos para correr largo con estas zapatillas. Así, con una altura de 19 mm y 27 mm, las Salomon Sense Ride 4 tienen un drop de 8 mm, que ha sido ideal para correr de forma constante a ritmos tranquilos durante horas, con un apoyo decidido de talón que no acaba pasando factura, gracias a la buena amortiguación trasera de la zapatilla.
Sin duda, la combinación de espumas de la tecnología Optivibe en la media suela, que tan buenos resultados dio ya en la anterior versión, con la intención de reducir la fatiga muscular concede una buena amortiguación en la pisada y, a su vez, facilita el impulso del despegue. Eso ha significado que el corredor ha percibido en todas las pruebas un impacto suave y seguro, al igual que una reactividad mayor a la esperada al correr. Es una de las cosas que más valoramos de estas zapatillas. Así ha sido en entrenos que han ido de un par de horas hasta jornadas completas por la montaña, en las que se corría y también se caminaba.
Otra de las características que debemos citar aquí es la mayor amortiguación y protección que se obtiene mediante la incorporación de las plantillas Ortholite, ligeramente acolchadas y con un diseño ergonómico que aporta su granito de arena también en cuanto a la comodidad y sujeción del pie.
Ahora bien, volviendo a subrayar la universalidad de estas Salomon Sense Ride 4, hemos realizado con éxito entrenos cortos y rápidos, donde los ritmos intensos también han sido protagonistas. El gran número de líneas de flexión en la suela hacen que la zapatilla, una vez bien sujeta al pie, pueda darnos una buena respuesta también en este tipo de salidas, con un dinamismo muy digno y a tener en cuenta, siendo notable la flexibilidad en la zona delantera, haciendo gala de la versatilidad de unas zapatillas que nos pueden servir para todo.
Tipo de terreno
Tipo de terreno
El diseño de la suela Contragrip MA de las Salomon Sense Ride 4 mantiene los característicos tacos romboidales de unos 3 mm de prominencia, dispuestos de forma que garanticen un buen grip en todo tipo de superficies. Sin ser específica para nada, nos ha servido para todo.
Resulta lógico que unas zapatillas para largas distancias tengan una mayor polivalencia, para afrontar disparidad de terrenos. Si bien las pistas y caminos con las superficies compactas y no muy técnicas han sido las que con mayor garantía y seguridad hemos recorrido, ha resuelto de forma eficiente el tránsito por zonas en las que habitualmente se corre con tacos más prominentes, como en barro, hierba o piedra suelta. Algunos días hemos pasado por zonas en las que se mezclaba nieve desecha con barro, siendo inevitable que la suela quedara saturada (los tacos pequeños ahí no pueden hacer más), pero resulta destacable que una vez volvíamos a zonas secas, la evacuación ha sido muy rápida quedando la suela limpia en pocos metros de carrera.
Tampoco hemos tenido sorpresas desagradables en zonas mojadas. El comportamiento de nuestra suela ha sido más que correcto, perdiendo capacidad de agarre donde lo pierden todas (como es sobre piedra lisa, tipo pizarra, mojada). Pero, bajando el ritmo y poniendo más atención por nuestra parte, no hemos tenido que lamentar caída alguna.
Así pues, en todos los casos el grip mostrado ha sido siempre correcto, incluso mejor de lo esperado en ciertos momentos. Toda una garantía para que el corredor pueda sentirse seguro y confiado, a lo que hay que sumar la protección del Profeel Film al pisar piedras o superficies duras irregulares, evitando que la planta del pie sufra un excesivo impacto.
En cuanto a las protecciones exteriores del upper, han cumplido también con su función, cubriendo perfectamente la zona del talón, y resguardando la parte delantera mediante un contorno semi rígido, suficiente para los más habituales contratiempos. Por su parte, el tejido del mesh es suave y transpirable, cómodo y agradable en días de más calor, pero no impermeable a la entrada de agua. Gracias a eso, en cambio, al mojarse el interior del pie (cuando hemos estado pisando nieve) en seguida volvía a quedar seco, sin tener que aguantar la incómoda sensación de los pies empapados durante mucho rato.
Pese a que seguimos haciendo bandera de la polivalencia de las Salomon Sense Ride 4, no podemos finalizar este apartado sin advertir que, si nos vamos a meter por caminos de cabras, en los que el terreno irregular va a ser lo habitual, transitando por laderas empinadas o con giros bruscos, resultará conveniente tener bien sujetas las zapatillas a nuestro pie (recordemos lo dicho respecto al Quick Lace, que será clave ante la menor sujeción en el talón) para salir lo más airosos posibles pues, en otro caso, perderemos fácilmente la buena estabilidad obtenida en terrenos más agradables, así como la precisión de nuestra pisada, pudiendo llevarnos alguna indeseable torcedura de tobillo.
Durabilidad
Durabilidad
La calidad de los materiales de las Salomon Sense Ride 4, junto a las mejoras que se han ido acumulando versión a versión, han dado como resultado una mayor durabilidad de todos los componentes de estas zapatillas, patente tras los dos meses de pruebas realizadas.
Las protecciones de la zona del upper, con mayor cuerpo o estructura, no se han despegado ni dañado por el roce o impacto de piedras y demás elementos que encontramos por los caminos. En cuanto al tejido del mesh, más agradable y suave en esta ocasión, no ha perdido resistencia, sin sufrir daños a lo largo de las pruebas. En cuanto a la suela, que es toda de una pieza, permanece bien sujeta y mantiene perfectamente fijados todos los tacos, cuyo desgaste no va más allá de redondeo de sus aristas, inevitable por los kilómetros ya recorridos.
Al margen del aspecto exterior de las Salomon Sense Ride 4, la durabilidad de las sensaciones percibidas por el corredor se ha mantenido inalterables a lo largo del tiempo, tanto en relación a la comodidad otorgada al pie por el trabajado interior de la zapatilla como la respuesta al impacto, siguiendo el Optivibe de la media suela facilitando el correr de forma cómoda y protegida, pese a las muestras de compactación que se pueden apreciar en algunas fotos.
Autor: Sergio Perbech