SENSE PRO MAX

He tenido la ocasión de probar muchos modelos de Salomon a lo largo de los últimos años, zapatillas para entrenar, para competir, incluso para otros deportes, y estas Salomon Sense Pro Max son diferentes. Se sienten muy ligeras (solo 290g en 8US), el pie entra con una facilidad pasmosa, y una vez dentro parece que los dedos tengan todo el espacio libre que quieran, aparenta ser una horma muy ancha. Una vez cierras el típico cierre de la marca, tampoco transmite una sensación de ajuste muy fuerte, el pie se siente bastante libre. De hecho la primera vez, te parece que llevas el pie suelto, y vuelves a apretar la zapatilla, y eso te lleva a sentir un punto de presión molesto en la zona alta de la lengüeta.

La verdad es que estos días está haciendo bastante calor, y estamos entrenando bastante para nuestros objetivos veraniegos, así que unas zapatillas ultreras, ligeritas y aparentemente fresquitas pueden ser unas buenas aliadas, así que vamos a darles caña a ver qué tal se portan.

Una vez más, os traemos una review de una de las marcas más conocidas del trailrunning (sino la que más), la casa francesa Salomon. El equipo de probadores, solemos dar palmas de alegría cuando tenemos que preparar la review de algún producto de la casa, porque la mayoría de las ocasiones tiene que ver con su gama S-lab, la gama de competición. Pero esta vez, vamos a probar algo muy especial, algo realmente innovador en la marca y que va a suponer un cambio importante en el futuro de las zapatillas de Salomon. Se trata de las Salomon Sense Pro Max.

Y que tienen de diferente estas Sense Max Pro, la mediasuela VIBE, un nuevo compuesto desarrollado por Salomon, que siguiendo las tendencias actuales, promete una media suela, más cómoda, con mayor absorción de impactos y más reactiva.

Un concepto diferente al que la casa nos tiene acostumbrados, y que en este primer modelo, clasifican como zapatillas para largas distancias. Teníamos referencias de las Sense Pro, vamos a ver cómo se comportan y que nos proponen estas Salomon Sense Pro Max.

Si hay algo que hace diferente a estas zapatillas Salomon Sense Max Pro es el compuesto sobre el que está desarrollada la media suela. VIBE, es su nombre. ¿Qué es el VIBE? Básicamente es un concepto de media suela que se define como un sistema que reduce los impactos con lo que se reducen las lesiones, reduces el cansancio y mejoras tu rendimiento, mientras mantiene la reactividad de la zapatilla (¡ahí es nada!). Está compuesto por 2 elementos el FuelCell+ y OPAL. El primero es un contenedor del segundo. OPAL es un material desarrollado por Salomon, de aspecto muy blando y chicloso, y que es visible a través del interior de la zapatilla por una muesca bajo la plantilla. Es el encargado de recibir la energía del impacto y distribuirla hacia la estructura de FuelCell+ que es la encargada de dar a la zapatilla una respuesta viva y enérgica.

¿Y cómo funciona? Muy bien, y lo podemos afirmar sin dudas. De lo mejor que hemos probado en unas zapatillas de trail. No podemos afirmar que “reduce el cansancio”, pero sí que os podemos asegurar que tienen comodidad sobresaliente, un auténtico sofá, sin tener que recurrir a perfiles tamaño Maxi. El OPAL está distribuido en las piezas talón y ante pie, con lo que la sensación de comodidad a la hora de correr es muy homogénea en todo el pie.

Les hemos dado mucha caña para ver hasta qué punto el material no se deforma con el paso de los kilómetros, y realmente su respuesta se mantiene como el primer día.

Absorbe bastante bien las irregularidades de pequeño tamaño, con las de medio y gran tamaño se encuentra más incómoda con una pisada más complicada donde hay que estar atento y tener unos buenos tobillos. Echamos de menos algún sistema de protección contra impactos en la zona delantera. Así que ante estos problemas en terrenos muy rotos o técnicos, profundizamos en su comportamiento en situaciones más amables. Sobre terreno para correr, el comportamiento del VIBE es un lujo para tus pies.

Como esto que os hemos explicado, podríais llegar a pensar que estamos ante una zapatilla “comodona” y perezosa. Lo primero si, lo segundo no. Esto es una de las cosas que más nos ha gustado del comportamiento de la media suela. Es una zapatilla muy cómoda, pero que permite correr a ritmos alegres sin sacrificar su mayor virtud. No son unas voladoras, ni unas zapatillas súper reactivas, pero sí que tienen un espectro de uso muy elevado. Podrías correr des de una media maratón hasta un ultra sin problema. Las limitaciones de las zapatillas, vienen por otro lado (sujeción, agarre…)

La lengüeta de las Salomon Sense Pro Max es muy fina pero cumple su cometido a la perfección. Toda la pieza está unida al upper en forma de botín de una pieza que evita la entrada de piedras y cualquier otra cosa que pueda resultar molesta dentro de la zapatilla.

Al tener tan poco grosor, el sistema de atado tiene a generar un punto de presión en la parte alta que llega a ser molesto porque la lengüeta no tiene suficiente grosor. Hay que vigilar cuando las atamos y buscar el equilibrio entre sujeción y comodidad (0 puntos de presión)

Salomon recurre a su clásico sistema de atando Quicklace que tan bien conocemos de otros modelos, con sus virtudes y sus defectos. Y en este caso no es una excepción, con el paso de los kilómetros sobre todo si pican para arriba, tendremos que ir parando para darle un pequeño tirón para apretarlas y que tienen cierta tendencia a aflojarse.

Para los que no hayáis utilizado nunca este tipo de cierre, tenéis que saber que para un ajuste perfecto lo ideal es una vez apretadas, andar un poco con ellas para que el pie se acomode dentro de la zapatilla y entonces volver ajustar el cierre para tener un ajuste perfecto. Si seguís esta pequeña recomendación, el sistema funciona perfectamente.

Con este modelo Salomon Sense Max Pro, el fabricante ha dispuesto de una horma generosa, sobre todo en la zona delantera. El upper está formado por unas refuerzos de TPU en los laterales de tejen la estructura para dar una sujeción notable a la zapatilla. Esto no es más que el resumen de otra tecnologia clásica de Salomon, Endofit + Sensofit, una combinacion de estructuras para garantizar un buen ajuste. En el caso de esta zapatilla, hay un hecho diferencial respecto a otros modelos que hemos probado con la misma tecnologia.La horma es generosa, y ofrece más volumen que sus hermanas. Aqui es quizás donde la marca ha de acabar de ajustar las estructuras para mejorar la sujección de este modelo. En pistas y terrenos fáciles, puedes correr muy rápido que la zapatilla responde y sigue tus movimientos, en cambio sobre terreno técnico baja su rendimiento, y en zonas comprometidas o apoyos buscando el limite vamos a ver como el pie se desplaza dentro de la zapatilla.

Si eres de lo que pronas con severidad, ves con cuidado, si algo hemos echado en falta a esta zapatilla es que dispongan de un chasis más rígido, que aporte más sujeción, rendimiento y estabilidad. Una de las cosas que faltan en algún sistema de pueda ayudar a una pisada más eficiente, como hemos visto en algunas otras zapatillas ultreras.

Aparentemente las Salomon Sense Max Pro son unas zapatillas “sencillas” –léase bien las comillas- . Visualmente no disponen de excesivas piezas de TPU para dar consistencia, ni tampoco demasiadas protecciones, están casi queda reducida a la puntera para una mínima protección frente a impactos. Esto no es una queja, sino un apunte para poder explicaros que estamos delante de una zapatilla fina y elegante donde apenas hay costuras y los sellados están ejecutados con perfección dando como resultado una zapatilla con un acabado visual sobresaliente. En el interior pasa algo parecido, los acabados son excelentes.

Para la plantilla, como es habitual en la marca recurren a la marca Ortholite que provee de unas plantillas con un grosor medio y que vienen preformadas para dar una excelente cobertura al pie.

Hemos podido poner a prueba las Salomon Sense Pro Max durante una intensa ola de calor, y ha sido un gustazo. Son unas zapatillas ligeras y muy frescas, con un upper que transpira de una manera fantástica (importante como siempre usar los calcetines adecuados a la época). La forma del mesh es una estructura muy abierta y poco tupida si las comparamos con otros modelos Sense Pro, que facilita el paso del aire y poder mantener una temperatura de confort muy agradable.

No hemos echado en falta ningún sistema de impermeabilización, ya que la capacidad de secado es muy alta, y en pocos minutos tras cruzar un rio, y atravesar una zona muy humera volverán a estar secas.

La suela de las Salomon Sense Max Pro es uno de los aspectos mejorables de este modelo. La suela de estas zapatillas esta formadas por varias piezas independientes con unos tacos en forma de rombo que cambian su compuesto en la zona delantera y la trasera. Son tacos de tamaño medio y no muy profundos.

En general la respuesta de la suela es correcta sobre terrenos de área compacta o piedra. Hasta aquí nada que objetar. El problema reside cuando tenemos bajo nuestros pies cualquier otro tipo de terreno, arena suelta, piedra mojada, barro, donde el agarre es insuficiente.

Hemos pasado situaciones límite (alguna nos llevó al suelo) en trialeras de subida o bajada de tierra, es un terreno conocido con lo que tenemos muchas referencias de otro tipo de suelas incluso de la propia marca.

Sobre pista o single track facilón, el agarre es correcto, te permite correr fácil. Para que os hagáis una idea, vemos que terrenos como por ejemplo UTMB (si no llueve) podrían funcionar muy bien: terreno “poco técnico”, y por ejemplo no las vemos en terreno tipo “Ultra Trail Andorra”, con terreno muy técnico, mucha piedra, terreno húmedo.

El taco es bastante blando – en esa línea del fabricante de diseñar una zapatilla cómoda- sin embargo hemos visto un deterioro importante de los mismos y una disminución del rendimiento con el paso de los kilómetros (+ de 200km). También hemos visto como una de las piezas de la suela ha empezado a despegarse.

Con algo más de 200km con ellas, muestran síntomas importantes de desgaste. Sobre todo, en la suela, donde con apenas 100km empezaron a aparecer algunas muestras muy visibles de desgaste en los tacos, que no han hecho más que empeorar con el paso de los kilómetros. En los últimos días hemos visto algún detalle en forma de descosido en la zona interior y del collar.

El upper sin embargo, se ha mostrado resistente y mantiene un aspecto impecable (quitando el polvo acumulado)

A la hora de escribir las conclusiones de estas Salomon Sense Pro Max tenemos sensaciones encontradas. Por un lado el concepto VIBE nos ha encantado, las sensaciones que transmite son fantásticas, sin embargo, el resto de la zapatilla no está a la misma altura. Es una zapatilla que funciona muy bien sobre terrenos rodadores, poco técnicos, que te permite correr rápido, cómodo, con una sensación de ligereza bastante inusual  y en épocas de calor es muy fresca. Lo que ocurre es que si te sales de estas condiciones, su rendimiento baja en picado.

Son una buena opción para aquellos que quieran iniciarse al trail con una zapatilla amable, resistente y que te permita correr por la montaña con ciertas garantías. Pero a la vez puede ser una opción interesante para cualquier corredor más experto que busque una zapatilla polivalente en cuanto a distancias, siempre que el terreno sea fácil. Tienen algo muy bueno, y es que vas a poder correr con ellas en un abanico grande de distancias, desde media maratón hasta incluso ultras (hasta 100km)

Es el primer modelo de trail con este concepto. El VIBE es muy bueno, y apunta maneras, si la casa francesa es capaz de evolucionar este modelo, darle un chasis con personalidad y una suela como las que hemos podido probar en otros modelos de la casa, podemos estar ante un futuro zapatillón. En algunas ferias internacionales ya hemos podido ver algunas propuestas de la marca que van en esta línea, pero de momento habrá que esperar.



PROs:

+ Nueva media suela

+ Diseño

+ Tranpirabilidad

+ Ligereza



CONTRAs:

- Sujección en terrenos técnicos

- Agarre en subidas y bajadas

- Durabilidad de la suela