S-LAB MOTION FIT 360
SALOMON
DATOS TÉCNICOS
- Peso -- g
- Precio 350,00 €
- Temporada SS20
GALERÍA
CONCLUSIONES
Pros & Contras
PROS
+ Inmejorable equilibrio entre impermeabilidad, transpirabilidad y ligereza
+ Muy buenos valores de resistencia al paso del agua (28.000 mm de columna de agua) y de resistencia a la evaporación (RET < 3)
+ Muy buen fit, que permite correr con mucha comodidad
+ Práctico sistema de porteo en la cintura
+ Excelente cortavientos
CONTRAS
- A tener en cuenta la fragilidad del tejido frente a roces y enganchadas
- Falta de reflectante en la espalda, que lleva en pecho y mangas
- Si la talla es un poco grande, la estabilidad del sistema de porteo en la cintura necesita recolocarlo de tanto en tanto, especialmente si el ritmo de carrera es alto.
Conclusión
La Salomon S-Lab Motion Fit 360 está destinada, sin duda, a los corredores más exigentes que busquen las máximas prestaciones en una chaqueta impermeable. Su construcción a base de la membrana GORE-TEX® Active SHAKEDRY® cumple sobradamente los requisitos de impermeabilidad y de transpirabilidad de los reglamentos de las ultras. Sin embargo, para utilizarla en una ultra hará falta minimizar la mochila, dado que no la podemos llevar encima de la chaqueta. Durante el periodo de prueba, hemos corrido sin problemas con una mochila de capacidad media (6 litros), sin perder movilidad ni confortabilidad. Sin embargo, en la prueba “en seco” con la mochila que este probador utiliza para las grandes ultras, con un volumen de 12 litros, se pierde toda la holgura tensando el tejido y, por ende, restringiendo la movilidad.
Con la salvaguarda anterior, correr bajo la lluvia con la Salomon S-Lab Motion Fit 360 ha resultado totalmente satisfactorio, tanto desde el punto de vista del comportamiento frente al agua como de la movilidad. En este sentido, el ajuste de la prenda nos ha permitido correr muy cómodamente, sin limitaciones a nuestra dinámica de carrera. Además, el tacto del tejido con nuestra piel no es en absoluto molesto, todo lo contrario, asemejándose mucho más a las sensaciones de un cortavientos que al de una membrana. Y, hablando de cortavientos, su comportamiento como tal ha sido impecable. A todo esto, hay que añadir qué todas las acciones para adaptarnos a la meteorología (poner y sacar la capucha, subir y bajar la cremallera, recoger la chaqueta en la cintura y volver a ponerla) han sido muy fáciles de ejecutar.
En resumen, la Salomon S-Lab Motion Fit es una chaqueta membrana ideal para las competiciones, donde la búsqueda del rendimiento deportivo es máximo y necesitamos el mejor equilibrio entre ligereza, movilidad y protección contra los elementos, siempre que tengamos en cuenta las limitaciones de la falta de resistencia superficial del tejido.
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REVIEW
Fit general
Fit general
El patronaje de la chaqueta Salomon S-Lab Motion Fit 360 es ligeramente holgado, de acuerdo con la filosofía de la tecnología Motion Fit™ 360º para conseguir una absoluta libertad de movimientos. El tacto del tejido utilizado (GORE-TEX® Active con tecnología Shakedry™), a diferencia de otras muchas membranas, no es ni rígido, ni acartonado, ni “plasticoide” (disculpad por el “palabro”). La sensación en contacto con la piel corresponde más a la de un cortavientos que a la de un impermeable. Esta cierta holgura se mantiene en los puños y en el cuello, permitiendo una mínima circulación de aire al interior, muy recomendable para evitar la saturación del vapor de nuestro sudor.
Especialmente ingeniosa es la solución de ajuste de la capucha, gracias a una cinta elástica que se adapta a nuestra cabeza que hace innecesario cualquier otro mecanismo, impidiendo además que el sudor baje hacia la frente. Dicha banda está termosellada en cuatro puntos al interior de la capucha, de manera que la superficie de dicha capucha queda separada de la cabeza, creando una “cámara de aire” las ventajas de la cual las veremos en una sección posterior. En cualquier caso, la capucha queda bien fijada, nos protege bien, no se mueve y no hace el efecto vela con el viento en contra.
Igualmente ingeniosa es la estratégica presilla situada en la parte superior de la cremallera, que permite abrirla prácticamente en su totalidad evitando que la chaqueta se abra y que se mueva al ritmo de la carrera. Esto compensa la ausencia del doble carro en la cremallera, no perdiendo así la posibilidad de la ventilación frontal sin perder protección en cabeza, hombros, brazos y espalda.
Como veremos, una de las “características” (que no defecto) es la imposibilidad (o la no recomendación) de llevar mochila encima de esta chaqueta. Para no limitar su uso, el diseño en la espalda incorpora un pliegue con una generosa holgura, de manera que podemos cubrir nuestra mochila con la chaqueta. Obviamente, la talla de la chaqueta en relación a nuestra anatomía marcará el volumen viable de dicha mochila. En nuestro caso, hemos corrido con una mochila chaleco de capacidad media, unos 6 litros, con bidones delanteros, y no hemos tenido ningún tipo de problema. Una prueba “en casa” con una mochila de mayor volumen (12 litros) ha puesto al límite la holgura de la prenda, tensándola hasta limitar la libertad de movimientos.
En resumen, la Salomon S-Lab Motion Fit 360 podemos correr muy cómodamente, protegidos del viento y de la lluvia, siendo muy fácil manipular tanto la cremallera como la capucha. El sistema de recogido en la cintura resulta muy práctico, siendo perfectamente posible hacerlo en carrera y sin necesidad de parar, tanto para recogerla como para extraerla y ponérnosla. Eso sí, mejor que sea en un tramo sin complicaciones donde podamos bajar un poco la guardia.
Materiales y extras
Materiales y extras
La chaqueta Salomon S-Lab Motion Fit 360 está confeccionada con el tejido GORE-TEX® Active SHAKEDRY™. Recordemos que el GORE-TEX® es una membrana de politetrafluoretileno (o Teflón) expandido, de manera que se generan poros que permiten la evaporación del sudor (en forma de vapor) pero impiden el paso del agua en forma líquida. Sin entrar en más detalles (hay abundante información accesible al respecto), estas cualidades físicas dotan las membranas GORE-TEX® de una gran resistencia al paso del agua (liquido) y muy poca resistencia al paso del sudor (en forma de vapor). La singularidad de la versión GORE-TEX® Active SHAKEDRY™ es que prescinde de la capa exterior de protección de la membrana para ganar ligereza y compresibilidad, renunciando así a la resistencia frente a roces y desgarros, al tiempo que la aplicación de la tecnología SHAKEDRY™ evita la acumulación de agua en la superficie y facilita la expulsión con una ligera sacudida, haciendo honor a su nombre (shake).
Las uniones de entre las diferentes piezas de este tejido están resueltas con costuras termoselladas de gran calidad, incluidas las de la cremallera, garantizando al estanqueidad del conjunto. Únicamente en la cintura, en lps puños y en las protecciones de las gomas elásticas de capucha y puños encontramos costuras tradicionales que, en ningún caso, comprometen la mencionada estanqueidad.
La chaqueta queda rematada en la cintura por una banda elástica que se cierra con cuatro botones de presión justo debajo del inicio de la cremallera. La función de esta banda, además de evitar que la chaqueta se abra, es guardar la chaqueta en, tal como detallaremos en la sección de plegabilidad.
Dado que el objetivo de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 es reducir al máximo el peso (en nuestro caso, en talla L, 159 gr), prescinde de cualquier accesorio que comprometa su ligereza y funcionalidad, como pudiera ser cualquier tipo de bolsillo. De lo que no prescinde es de reflectantes, que encontramos en el pecho y en la parte superior de las mangas.
Impermeabilidad y transpirabilidad
Impermeabilidad y transpirabilidad
Los valores de resistencia al paso del agua y de la evaporación de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 son simplemente espectaculares y muy difícilmente superables en una chaqueta de esta ligereza. De entrada, partimos de la base de la resistencia al paso del agua del material base de las membranas GORE.TEX®, ni más ni menos que 28.000 mm de columna de agua, lo que equivale disponer de protección extrema, según la norma ISO 811:1981. Si a esto añadimos una escrupulosa confección, con uniones termoselladas entre las diferentes piezas, y con cierres elásticos en puños y cintura, la salvaguarda frente a la lluvia es máxima. Además, la aplicación de la tecnología SHAKEDRY™ permite eliminar fácilmente las gotas de agua de la superficie de la chaqueta, gotas que se forman gracias al tratamiento deperlante DWR. Es decir, que no acumularemos humedad ni peso innecesario ni en carrera ni cuando la guardemos.
En cuanto a la transpirabilidad, la membrana GORE-TEX® Active que “monta” la Salomon S-Lab Motion Fit 360 tiene una resistencia al paso del vapor muy baja, con un RET < 3, que la sitúa, de acuerdo con las categorías establecidas por el Instituto Hohenstein, en la más exigente (RET entre 0 y 6), correspondiente a “Muy bueno. Extremadamente transpirable. Confort durante la actividad intensa”. ¡Más no se puede pedir! ¿O no? ¡Pues sí se puede! Gracias a la holgura de la chaqueta, contamos con una “cámara de aire”, que evita la condensación del sudor y facilita su evaporación a través de la chaqueta. Se agradece especialmente esta cámara en la capucha, debido a la cinta elástica de sujeción que mantiene separada la membrana, ya que es la cabeza la parte del cuerpo que más calor disipa.
Tanto los parámetros de impermeabilidad como de transpirabilidad como la confección de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 cumplen los requisitos mínimos de los reglamentos de la carreras más exigentes.
Con viento, y en ausencia de lluvia, el comportamiento de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 como cortavientos es impecable, más teniendo que, siendo una membrana, el peso (159 gr) es muy contenido. Nuestra experiencia con esta chaqueta, tanto corriendo en la zona del Cadí-Moixeró como en sorteando intensas lluvias en Collserola, ha sido más que positiva, manteniéndonos protegidos y confortables. En todo caso, las pruebas han sido entre finales de verano y principios de otoño, en un ambiente razonablemente atemperado. Para temperaturas bajas, necesitaremos seguro añadir una capa térmica.
Plegabilidad
Plegabilidad
Una de las señas de identidad de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 es el sistema para llevar la membrana enrollada en la cintura, gracias a una franja elástica que cierra la parte inferior de la chaqueta y que permite envolverla sin necesidad de extraerla en su totalidad. De esta manera, reduces o evitas en tu mochila el volumen, por pequeño que sea, de la membrana impermeable. O, simplemente, prescindes de cualquier accesorio para llevar contigo la protección frente a lluvia y viento.
La cintura que recoge la chaqueta es, como decíamos, elástica, gracias al 27% de elastano que tiene el tejido, y se cierra justo debajo del inicio de la cremallera con cuatro botones a presión. El tejido es muy transpirable (incluso cuenta por pequeñas perforaciones dispuestas regularmente), para no retener de manera innecesaria la humedad que pudiera quedar al guardar la chaqueta.
El proceso para guardar la Salomon S-Lab Motion Fit 360 no es en absoluto complicado. Basta con bajar la cremallera, extraer las mangas de los brazos, con las que “abrazaremos” nuestra cintura y envolver el conjunto con la franja elástica inferior. Eso sí, hace falta que la talla sea la justa para que la elasticidad de dicha franja evite el movimiento o que se salga. Más fácil resulta el proceso inverso, es decir, volver a ponerse la chaqueta. Como recogíamos en una sección anterior, es perfectamente posible hacerlo en carrera sin necesidad de parar.
Y si fuera el caso, podemos plegar la chaqueta Salomon S-Lab Motion Fit 360 en un volumen reducido. En nuestro caso, nos gusta utilizar la propia capucha como envoltorio.
Resistencia y durabilidad
Resistencia y durabilidad
Como en este mundo nada es gratis, las excelentes cualidades de la Salomon S-Lab Motion Fit 360 de ligereza, impermeabilidad y transpirabilidad tienen un precio, precio que paga la resistencia. La membrana GORE-TEX® Active con tecnología SHAKEDRY™ prescinde de la protección exterior (habitualmente de PU), lo que la hace frágil frente a rozaduras y desgarros. De hecho, todas las chaquetas que utilizan esta membrana desaconsejan el uso de mochila encima, y plantean diferentes soluciones para llevarla por debajo. En la Sección 3 hemos explicado el sistema que utiliza este modelo concreto. Y, obviamente, mejor evitar, si podemos, las zonas de vegetación espesa y agresiva.
Ciertamente, si queremos amortizar la inversión que supone la adquisición de una prenda tan específica y exigente como la Salomon S-Lab Motion Fit 360, deberemos ser muy rigurosos en el cuidado y en el mantenimiento de la misma, siguiendo escrupulosamente las instrucciones de lavado (no en seco, sí a máquina con agua fría y doble enjuague), y reponiendo el tratamiento deperlante DWR de tanto en tanto. Nuestro periodo de pruebas no puede ser lo largo que necesitaría una sección como esta, pero, habiéndola tratado con mimo, está como el día que la sacamos del paquete. Además, convenientemente ventilada, no notamos que retenga malos olores.
COMPARADOR
Vs.
Autor: Andrés Lezcano
Fecha de publicación: 18/10/2020