ZOOM WILDHORSE 3

Se parecen más a una zapatillas de asfalto que a unas de montaña. Así son las Nike Zoom Wildhorse 3. Esto tiene su lado bueno y su lado malo: al calzárselas por primera vez, destaca muchísimo la sensación de comodidad. Pocos modelos de montaña son tan cómodos, de hecho, son más amables con el pie que muchas de asfalto. Todo un logro. Sin embargo, el upper está desprotegido: no tiene nada que evite golpearse con piedras o ramas, ni siquiera en la puntera, algo vital en la montaña.
La estética, el perfil bajo, la suela y la desprotección del upper ya advierten de que se está ante unas voladoras de la montaña. Apenas pesas 269 gr en una talla 8 US. Casi parece que se pisa sobre una nube. La amortiguación cede al dar unos pasos, lo que incrementa esa impresión de levedad.
El interior de las zapatillas está cubierto por una tela que no deja costuras al aire. Si uno se siente Kupricka, puede ponerse las Nike Zoom Wildhorse 3 descalzo sin inconvenientes, aunque con calcetines será mucho mejor.
El pie entra perfectamente, casi sin querer, y hay espacio para mover los dedos. Aquellos corredores que tengan el pie ancho, podrán usar esta nueva versión de Nike, a pesar de que no tiene la puntera más ancha del mercado.
El diseño es bastante atractivo. Bonito. La firma de Bowerman y Knight tiene un estilo propio, toda su vestimenta parece cortada por la misma tijera. Es fácil diferenciar un modelo de Nike del resto y lo mismo ocurre con las Wildhorse 3. Tienen un upper sobrio, que mezcla tonos grises con conglomerados de colores. La media suela no pasa desapercibida, de color naranja, rompe con la formalidad disimulada del upper. También hay otra versión que combina azul y verde. Es preciosa.

En el último Ultra-Trail du Mont-Blanc (UYMB) dos corredores norteamericanos arrasaron llevando unas Nike Zoom Wildhorse 3. Una marca sobre todo asfaltera, quedó por delante de genuinas de la montaña. David Lane fue 4° en el UTMB y Zach Miller ganó la modalidad CCC.
Ambos con un perfil muy similar: atletas que comenzaron en el asfalto o dando vueltas a una pista de tartán para pasarse luego a la montaña. Nike se ha introducido en el mercado del trail con este tipo de corredores. Lo ha hecho poco a poco, sin grandes campañas publicitarias, pero llevando a su equipo a los eventos más importantes del panorama. La prueba reina de Chamonix es un ejemplo.
Las Nike Zoom Wildhorse 3 son la nueva versión de una saga asentada y aceptada en el mercado; la marca ha ido perfeccionando este modelo con el paso de los años. No ha habido grandes cambios, pero los detalles están más cuidados ahora. La zapatilla es más completa, aunque su esencia sigue siendo la misa: ligera, rápida y especialmente cómoda.
Y así debe ser. Si no, la joya de Nike dejará de estar en la mente de los corredores de montaña, aunque saquen una cuarta versión. Parece que a los americanos les van bien, pero es hora de ver qué piensas los europeos de TRAILRUNNINGReview.

Las Nike Zoom Wildhorse 3 tienen un dropp de 8 mm. Se escapan de la medida estándar de 10 mm para ayudar a los corredores a adelantar la pisada e ir más rápido. Son para volar, ya sea en un ultra o en una carrera corta, pero para eso las han confeccionados.
La zona de flexión de la suela está localizada donde empiezan los metatarsos; un lugar habitual. Cuando se pisa sobre la puntera, la suela se dobla para volver a su sitio tras un rebote rápido que se transforma en una pisada fluida. Este efecto también se debe a la placa resistente que protege el pie ante terrenos abruptos, le resta sensibilidad del suelo, pero aumenta la seguridad. Nike apuesta por el natural running, no por el minimalismo.
El sistema Zoom Air domina la amortiguación trasera. Es un sistema muy efectivo, usado en muchos modelos de Nike. Al caer sobre el talón las fibras de la cámara de aire se contraen para disipar el impacto y vuelven a su forma original inmediatamente después, como si tuvieran prisa. Así se consigue una amortiguación reactiva.
La mediasuela está hecha de Phylon, que no es otra cosa que un Eva inyectado. Da mucha comodidad y cede fácilmente, lo que buscan muchos corredores. La mediasuela es más ancha en la parte central, algo que no es muy habitual en otras marcas, pero sí en Nike. Es como una ola que empieza en el talón, tiene la cresta en el medio, y acaba en la puntera.
Si pusiéramos nota, que se hará, la amortiguación delantera tiene un sobresaliente. Al tacto, el Phylon es un material blando que responde perfectamente sobre el terreno, a pesar de que se pise sobre zonas inestables. No es tan exigente con la técnica de carrera, por lo que el abanico de corredores que pueden usar las Nike Zoom Wildhorse 3 es muy amplio. Y esto no es casualidad, sino estrategia.

La lengüeta tiene un acolchado medio, ni muy mullido ni muy escaso. Por su forma, va muy pegada al pie y sobresale unos centímetros por encima del último cordón. No molesta en ningún en momento, lo contrario, asombra la comodidad que trasmite. Al tensar los cordones, la lengüeta protege el empeine y no se marcan los cordones, que son planos.
La primera Zoom Wild Horse llevaba la lengüeta cosida a los lados, pero en las siguientes versiones, 2 y 3, solo está hilvanada por delante. Se pierde seguridad y ajuste, pero se gana en transpirabilidad.

Nike no se ha complicado con el sistema de cierre: cordones, como toda la vida. Si algo funciona, ¿por qué cambiarlo? Sí han innovado, o al menos, dado una solución creativa para mejorar el ajuste: al tirar de los cordones unos hilos tensan el upper. La sensación que se logra es de abrazo, es como si la zapatilla envolviera al pie.
El upper es muy ligero. Está micro agujerado salvo en la puntera y el talón, lo que le da una buena transpirabilidad a las Nike Zoom Wildhorse 3.
El punto negativo está en la escasa o nula protección. El upper es simplemente un trozo de tela, sin ningún añadido para proteger el pie. Solo hay unas pequeñas bandas que no dan ninguna garantía; el talón es la única parte reforzada. Así que se está ante un modelo para terrenos fáciles, poco abruptos. Para ir al parque, correr por pistas o senderos sencillos, pero nunca para sortear piedras y cantos afilados. Aquí se nota el designed en USA.
Es cierto que esto limita su uso, pero aumenta las prestaciones de las Zoom Wildhorse 3 en terrenos sin complejidad. Tanto es así, que pocas puedes batirse en duelo con ellas y salir victoriosas.
El talón tiene una estructura robusta que se curva hacia el interior para favorecer la sujeción. Esta invención es un recurso habitual; como en la buena ingeniería, la solución más simple suele ser la mejor.

No hay un pero para los acabados de las Nike Zoom Wildhorse 3. Aunque es cierto que el upper no tiene mucha complicación. La zapatilla luce bonita, está bien ensamblada y eso se nota. La unión entre la tela de la parte superior y la media suela es perfecta.
Los acolchados del talón son los mínimos o casi inexistentes. En este caso, no hace falta más. Nike ha conseguido una comodidad impresionante sin pasarse con la goma espuma. Los kilómetros han caído y el talón ha seguido sin resentirse.
En cambio, sí que han aparecido yagas en la yema de los dedos gordos. Esto puede ser normal, pero en la actualidad, muchas zapatillas no hacen heridas ni siquiera el primer día de uso. Para colmo, en las Zoom Wildhorse 3 la misma molestia seguía apareciendo hasta después de tres o cuatro salidas, aunque se tomaran precauciones.
La plantilla no se puede quitar porque está pegada por la puntera. Es mejor dejarla dónde está y no probar a sacarla, a no ser que queramos tener una plantilla con un trozo roto de upper pegado. En cualquier caso, tampoco tiene nada sorprendente; es una plantilla al uso, no muy gruesa y sin control antibacteriano.

No existe la impermeabilidad en las Nike Zoom Wildhorse 3. El tejido no impide que entre el agua, es más, lo facilita. Pero lo peor es que el calcetín del interior del upper, que tanta comodidad aporta, retiene el agua. Es mejor evitar los charcos.
La transpirabilidad es buena. Después de que trabajaran en mejorar este aspecto en la segunda versión, y junto con el textil micro agujereado, la zapatilla respira bien. Es cierto que se podría mejorar: el calcetín interior le resta un poco, pero es difícil combinar confort y transpirabilidad en ocasiones.

Al darles la vuelta, es normal que se crea que las Nike Zoom Wildhorse 3 van a agarrar más bien poco. Los tacos de la suela tienen forma piramidal y no son muy prominentes, por lo que a priori en terrenos sueltos o con barro no agarrarán.
Por suerte, es todo lo contrario: la suela tracciona en zonas complicadas, aunque sin pasarse. Si se va al barro de Zegama, será mejor llevar otro par de zapatillas. Cuando hay mucho, el barro se acumula en la suela y es difícil correr, aunque el fango se suelta fácilmente cuando se sale de él.
En zonas de arena suelta o grava las zapatillas responden perfectamente, pero donde más se lucen en terrenos de tierra compactos. Los múltiples y pequeños tacos hacen que la tracción sea perfecta.
La suela está construida por dos tipos de materiales: el exterior lleva uno que resiste más la abrasión. Nike le ha puesto el nombre de 054 Super High Abrasion, aunque no es más que un caucho de alta resistencia al que han teñido de negro para mejorar el agarre. La parte interior tiene una densidad distinta, es un compuesto más blando que empieza a resentirse después de cientos de kilómetros.
Los tacos del talón están orientados hacia atrás para evitar derrapar en las bajadas. Las Zoom Wildhorse 3 son ideales para los que tengan confianza en los descenso y busquen apoyos precisos y rápidos.

Nike ha ideado una zapatilla de corte minimalista para rodar rápido por senderos accesibles. Esta simplicidad marca la vida útil de la zapatilla. La durabilidad de la suela no es un problema, tras el periodo de prueba es fácil darse cuenta de que están hechas para soportar kilómetros y kilómetros, millas y millas, como dirían los americanos. No importa que el terreno sea abrupto o sencillo, la suela soporta ambos perfectamente.
Lo que hace dudar es el upper: es endeble y parece que cualquier canto de piedra lo puede rasgar. Esto compromete seriamente la durabilidad de la zapatilla. En su defensa, hay que decir que no ha pasado durante los más de 200 Km que le han caído a las Nike Zoom Wildhorse 3, aunque no se sabe si por casualidad, o por virtud.
También hay que valorar que no haya salido las típicas mordidas en el upper o pequeñas perforaciones, por lo que, si nos alejamos de las rocas afiladas o pisamos con cuidado, hay zapatilla para rato. Para mucho rato.

Las Nike Zoom Wildhorse 3 destacan por su comodidad; parecen unas zapatillas de asfalto. Esta es la principal cualidad que tienen y parecen diseñadas para ensalzarla. El calcetín interior es muy confortable, ajusta al pie y lo acomoda sobre la amortiguación.
Están destinadas para correr por senderos sencillos, que no requieran demasiada parafernalia. Son ideales para los corredores de montaña que salgan de forma habitual por parques de tierra y hagan alguna salida por montaña; válidas para ambos terrenos. Son unas voladoras, de perfil bajo. En carreras en las que haya que ir rápido o existan tramos urbanos, son una de las mejores opciones. En el trail iremos con suficiencia y al salir de él, parecerá que se van sobre unas de asfalto.
Aquellos corredores de peso medio y ligero se encontrarán en las Nike Zoom Wildhorse 3 unas grandes aliadas para competir o entrar a ritmos muy variados con unas prestaciones excelentes.
Son bonitas. Simples, pero bonitas. La suela de color naranja de un toque de viveza a la zapatilla que se refuerza con el confeti de colores que hay en los escasos refuerzos.

Pros
- Comodidad.
- Excelente respuesta sobre el asfalto
- Versatilidad.
- Placa protectora del terreno.
- Buena amortiguación delantera y trasera.

Contras
- Falta de protecciones del upper.
- Nula impermeabilidad.
- Mala respuesta en terrenos embarrados.