MINIMUS 777 JACKET
MONTANE
DATOS TÉCNICOS
- Peso 145 g
- Precio 269,95 €
- Temporada SS16
GALERÍA
CONCLUSIONES
Descripción chaqueta
La Montane Minimus 777 Jacket está fabricada con la exclusiva membrana Pertex Shield+, de tres capas combinando una de nylon, una membrana transpirable y un ligerísimo tejido de punto. En este momento vamos a obviar la típica frase de “el ruido al tocarla con los dedos nos recuerda al plástico”, por que para nada es así. Tanto el tacto como el ruido que desprende nos alejan del concepto plástico inmediatamente; tiene una suavidad digna de las prendas que nos ponemos los domingos y una altísima maleabilidad y compactabilidad, tanto que no nos cuesta esconderla en nuestra mano. Pero si algo sorprende a primera vista es su extrema ligereza, que nos hace dudar que una prenda de tales características nos pueda proteger del viento, del agua y que además sea transpirable. Nos la ponemos y apreciamos un tallaje que, sin ser ceñido, tampoco es holgado; veremos si en carrera la mochila de hidratación podrá ir por fuera o dentro de la membrana, así como si correr con ella atada a la cintura es o no cómodo.
¿Y por qué el “777” en su nombre? Fácil: por que el tejido combina una lámina de nylon de 7 denier (denier: unidad del sistema métrico de hilos que representa el peso en gramos de 9.000 m de hilo en gramos), otra lámina transpirable de 7 micras (micras: unidad de longitud equivalente a la millonésima parte de 1 m) y un lámina de 7 denier de tejido tricot (tricot: tejido producido enlazando mallas formadas por un solo hilo).
Comprobamos que las mangas se adaptan correctamente a los brazos y permiten moverlos sin enganchones internos o tiranteces indeseadas; no obstante, al levantar los brazos hacia arriba vemos que nos dejan al descubierto una pequeña parte de las muñecas; aunque la talla es definitivamente la nuestra (talla M), parece que de mangas vamos un pelín cortos… Veremos si en carrera tenemos algún problema con este detalle. Una goma elástica recorre el puño solo por la mitad, con lo que no tiene fuerza suficiente para evitar que este se mueva cuando levantamos los brazos; la otra mitad del puño está formada por una mini solapa con la intención de recubrir mayor superficie de la mano.
El ajuste de la capucha viene determinado por la cremallera central: si la cerramos hasta su tope tapará hasta debajo de la nariz, dejando al descubierto una pequeña ventana de visión, tal y como se observa en las fotos. Como buen detalle debemos comentar que la parte frontal de la capucha tiene una doble extensión o solapa doblada sobre si misma, de manera que si queremos mayor protección (por que está cayendo una buena) podemos desplegar este segundo alerón con el fin de obtener mayor resguardo de la frente. En la parte trasera existe una pequeña goma elástica ceñida que ayuda a dotar de mayor sujeción al conjunto, pero que no podemos manipular ya que viene inserida en el interior de la misma membrana. Ahora bien, el ajuste es más que suficiente para que la capucha nos proteja adecuadamente a la par que nos deja libertad de movimientos plena y absoluta, sin interferencias o tiranteces que se acaben convirtiendo en posterior molestias.
En la cintura de la Montane Minimus 777 Jacket tampoco encontramos sujeción a medida ya que ésta es elástica sin posibilidad de ajustarla a nuestro antojo; hace que la chaqueta quede ceñida a nuestra cintura (pero sin apretar), evitando la entrada de agua o viento y de ahí que la parte posterior no sea más larga.
Introducción
La marca inglesa Montane lleva más de dos décadas diseñando ropa para la escalada, alpinismo, trekking y finalmente para Trail Running, con un objetivo bien definido: que sean protectoras pero transpirables, funcionales y que dentro de lo posible, tengan el menor peso posible. Sus prendas visten a los miembros de la Base Británica en la Antártida y al Equipo de Rescate de Montaña de ese país, además de patrocinar algunas de las ultras más duras del planeta, como la Spine Race.
Desde TRAILRUNNINGReview os traemos la segunda versión de una chaqueta membrana que en poco tiempo se ha hecho un hueco muy importante en este segmento, la Montane Minimus 777 Jacket, cuya primera edición analizamos hace ya dos años. Parece que las mejoras son evidentes, empezando por el peso al que le han reducido casi 100 g (baja hasta los 140 g), además de perder los tensores para ajustar la cintura y la capucha.
La Montane Minimus 777 Jacket tiene dos versiones: con cremallera total o bien la “Pull On”, donde ésta solamente llega hasta la zona del esternón, además de poder escogerla entre un “azul antártico” o gris.
Hemos tenido la ocasión de probarla bajo la lluvia y en alta montaña durante una noche entera, además de nuestros sitios habituales en condiciones climatológicas más benignas, y todo con la intención de poner a esta membrana en el máximo de escenarios posibles para extraer todas las conclusiones posibles, que han sido muchas. ¡Vayámonos a correr bajo la lluvia¡
REVIEW
Primeras sensaciones en carrera
Primeras sensaciones en carrera
La Montane Minimus 777 Jacket acompaña todos los movimientos que realiza nuestro cuerpo sin oponer ningún tipo de resistencia. El fit, para nosotros, es el adecuado ya que permite movernos con total desenvoltura pero sin que nos sobre tela por ningún lado. Vamos, que podemos ejecutar cualquier postura comprometida que realicemos en carrera sin molestia alguna. No obstante y debido a que la cintura es elástica, ésta tiende a subirse por los riñones si las mallas o camiseta que llevemos es de superficie resbaladiza, como puede ser la lycra. Bajo esta situación, el ajuste elástico de la membrana no queda bien fijado a nuestro cuerpo, especialmente al agacharnos o al subir alguna pared pronunciada (grimpando).
Otro punto negativo lo encontramos en la longitud de las mangas; si bien son articuladas –tal y como especifica la marca- favoreciendo la libertad de movimientos de los brazos, la longitud de las mismas no es la deseada cuando alzamos los brazos, ya que en ese momento dejan al descubierto una parte de las muñecas. El ejemplo más clarificador lo vimos clavando los bastones en subidas con muchísimo desnivel.
Con la capucha puesta (y la cremallera cerrada hasta arriba) la entrada del viento es casi inexistente y solamente se ha dejado notar cuando las ráfagas han sido potentes. Si no la llevamos puesta, la capucha no rebota al correr ni se convierte en un “paracaídas en el cogote” puesto que va bastante pegada al cuerpo.
Si la mochila que llevamos es de gran capacidad y va llena nos deberemos poner la chaqueta por debajo de ésta, ya que si no, seguramente no la podremos cerrar del todo. Por el contrario, si lo que llevamos es un chaleco de hidratación, no tendremos mayores problemas.
Impermeabilidad / Transpirabilidad
Impermeabilidad / Transpirabilidad
Junto a la ligereza y compactabilidad de la Montane Minimus 777 Jacket está su otra gran baza, que es la impermeabilidad. El valor es muy alto: 20.000 mmH2O (20 m columna de agua), y los resultados en las pruebas, al mismo nivel. Bajo lluvia persistente y duradera, lo único que sentimos fue las gotas repicar en la membrana, nada más. El agua no entra y la membrana cumple su función con nota inmejorable. La capucha, con su doble visera extendida evita que el agua de la lluvia nos empape la cara, aunque cuando ésta caía de lado, lo único que nos quedaba era torcer la cabeza para impedir que nos mojase totalmente (tema evidente y como en el resto de prendas de esta categoría, ya que es necesario dejar una ventana para nariz y ojos…). Pero el término impermeabilidad no implica repelencia al agua. La membrana no tiene ningún acabado DWR (repelencia de agua durable), lo que al final ayudaría a un tiempo de secado menor favoreciendo también a la transpirabilidad, ya que impide que la parte exterior se sature. Ello, en verdad, se deja notar en la Minimus 777 puesto que al mojarse notamos un aumento leve de su peso y una merma en las condiciones de transpirabilidad. Ello es subsanable mediante el uso de un spray DWR, aunque por el precio de mercado de la chaqueta, creemos que debería venir incluido. Y siguiendo con la transpirabilidad (el gran rompe-cocos de los fabricantes de membranas), ésta goza de unos índices también muy alto: 30.000 g/m2/24h. No obstante, cuando mayor transpiración hemos notado ha sido en mañanas o atardeceres muy frescos, en los que el propio cuerpo tiende a no sudar o sudar muy poco. En alguna carrera a ritmo alegre con temperaturas superiores a los 10 ºC, la condensación del sudor en el interior de la chaqueta era altamente notable, pegándose las mangas a los brazos. Desde luego sí podemos afirmar con rotundidad que el nivel de expulsión del sudor hacia el exterior se encuentra muy por la media de las membranas que habitualmente probamos en TRAILRUNNINGReview, pero aún queda un camino largo para los ingenieros textiles. Sin embargo, debemos matizar que si bajamos un poco la cremallera y subimos las mangas por el brazo, el aire que circulará por el interior será notable, obteniendo un plus de transpirabilidad que podremos modular a nuestro antojo.
Finalmente, situamos su capacidad corta vientos a la misma altura de la impermeabilidad, lo cual no deja de sorprendernos ya que al mirar de cerca la finura y ligereza del tejido asalta la típica pregunta de: ¿cómo algo como esto nos puede proteger tanto? Probada en alta montaña de día y también durante toda una noche de carrera, los resultados han sido realmente mágicos.
Cremalleras, bolsillos, reflectantes, acabados y extras
Cremalleras, bolsillos, reflectantes, acabados y extras
Decir que los acabados de esta Montane Minimus 777 Jacket no son de una excelente calidad seria negar la evidencia. Utilizan micro costuras para incrementar el área de transpirabilidad y reducir el peso y la cremallera frontal se ha construido bajo tecnología AquaGuard, es decir, que no deja que se cuele el agua ni por asomo; además, la cremallera tiene longitud completa y una vez cerrada es difícil verla a primera vista. Tal y como la marca publicita, todo va encaminado a reducir el peso de esta membrana para situarlo en los 140 g. El único bolsillo que encontramos, situado en el pectoral izquierdo y que es estanco, tiene la medida exacta para guardar el teléfono móvil, pero debido al bamboleo que se produce en carrera, proponemos su uso para aparatos tecnológicos más pequeños, como un reproductor de música, por ejemplo. La cremallera también se ha fabricado con el mencionado AquaGuard y abre por ambos lados, necesario para que, una vez guardada la chaqueta en el mismo bolsillo, podamos cerrarla.
Finalmente, los reflectantes van situados en el antebrazo izquierdo y en la espalda, con las palabras Pertex Shield+ y el logo de Montane, respectivamente; éste útlimo quedará tapado si utilizamos mochila. La carga lumínica del logo en la espalda es buena pero la del brazo izquierdo es casi nula. Creemos que el conjunto de los reflectantes es realmente escaso.
Plegabilidad
Plegabilidad
Otro de los puntos fuertes de la Montane Minimus 777 Jacket es su magnífica plegabilidad. En carreras cortas, si deja de llover o soplar el viento, la podemos fácilmente guardar en cualquier chaleco de hidratación o riñonera por muy minimalista que sea, ya que el espacio a ocupar será realmente mínimo. Pero además en aquellas carreras o salidas largas en las que finalmente no haremos uso de ella, ocupará lo mínimo en nuestra mochila, permitiendo más espacio para otros elementos que nos interese llevar.
Guardarla en su propio bolsillo nos llevará escasos segundos. Además, quedará totalmente fijada gracias a la cremallera que el bolsillo lleva colocada del revés, especialmente a tal efecto. Por contra, también la podemos introducir en su propia manga, operación aún más rápida que la de meterla en el bolsillo. En todo caso, su tejido tan maleable permite meter en un puño, una chaqueta de manga larga con capucha. Nos hemos acostumbrado mucho a ver imágenes de compactabilidad; tanto que a veces no le damos el valor suficiente a estas membranas, que ocupando tan poco espacio en nuestra carga nos pueden sacar de más de un apuro.
Además, si la llevamos atada a la cintura no molesta en absoluto puesto que permite seguir corriendo cómodamente sin que se convierta en un obstáculo; ideal para aquellas salidas en que la intermitencia de la lluvia o del viento es constante.
Durabilidad
Durabilidad
La Montane Minimus 777 Jacket, como membrana que es, tiene una resistencia limitada por motivos obvios. No obstante, no deja de sorprender que una prenda de tales características haya aguantado con nota altísima las pruebas sometidas. Después de un larguísimo trajín no aparecen signos de desgaste alguno, ni por las lavadas ni, especialmente, por el uso de mochilas o chalecos. De hecho, la marca proclama la resistencia de la prenda en base al número de puntadas del tejido, que son de 12-13 puntos de sutura en contraposición al nivel estándar del mercado, que es de 8 puntos.
Conclusiones
Conclusiones
Tenemos en las manos una membrana, la Montane Minimus 777 Jacket, que lo tiene todo para convertirse en la envidia de las demás. Peso pluma llevado al extremo pero combinándolo con protección muy alta frente al viento y la lluvia y que además cabe casi en el puño. Ideal para llevarla siempre en el fondo de la mochila para salidas cortas o largas, ya sean entrenos o especialmente carreras, ya que cumple con los requisitos técnicos de impermeabilidad y transpirabilidad que nos exigen las organizaciones. En resumen, una chaqueta membrana altamente compactable y ligera pero que nos proporcionará un grado de protección al más alto nivel. Sinónimo de garantía y fiabilidad.
Pros:
+ Ligereza, compactabilidad y súper protección todo en uno.
+ Muy cómoda al correr; casi ni se nota que la llevas, incluso atada en la cintura, y permite movernos con plena libertad.
+ Diseño
Contras:
- En nuestro caso particular, las mangas un pelín cortas.
- La cintura elástica permite que la membrana se suba un poco, especialmente si llevamos mallas o camisetas de lycra.
- Reflectantes: realmente escasos
COMPARADOR
Vs.
Autor: Fernando Pérez
Fecha de publicación: 22/08/2016