ROCFLY G 390

PROS:

1. Protecciones - en el sitio correcto que nos ayudan a proteger sin restar flexibilidad.

2. Media suela G-FLY - el grafeno no ha aportado una amortiguación y comodidad excelentes. 

3. Adapter-Flex + Grafeno - tenemos adherencia y tracción en la gran mayoría de terrenos.

4. Durabilidad - Podremos recorrer muchos kilómetros con ellas.


CONTRAS:

1. Adherencia en terrenos húmedos - hay que vigilar en terrenos rocosos mojados.

2. Upper permeable - en zonas con mucha arena se acaba colando por la transpirabilidad del upper.

Las nuevas Inov-8 RocFly G 390 son unas zapatillas que no pasan desapercibidas por su diseño, pero la gran sorpresa llega cuando nos las calzamos. La comodidad que ofrecen a nuestros pies la hemos encontrado en pocas zapatillas, y creemos haber encontrado unas grandes compañeras para nuestras salidas de CACO por largas que sean. 

Podréis combinar andar y correr por todo tipo de terrenos y las Inov-8 RocFly G 390 no os fallarán. Desde nuestro punto de vista el secreto se encuentra en la combinación de la mediasuela de la innovadora espuma Graphene-infused G-FLY™ con la suela GRAPHENE-GRIP™. Esta combinación nos ofrece una zapatilla que nos amortigua perfectamente, mientras nos brinda una tracción excelente gracias al grafeno en la gran mayoría de terrenos. Solo nos ha fallado en roca mojada.  El dibujo de la suela es importante, ya que incorpora el ​​ADAPTER-FLEX™ que aumenta la adaptabilidad al terreno. Elimina la suela dura de las botas de montaña, y nos ofrece las mismas sensaciones que las zapatillas de correr por montaña.

¿Correr? ¿Caminar? Las Inov-8 RocFly G 390 no son unas zapatillas para correr rápido, pero han sido nuestras grandes compañeras en salidas donde hemos ido alternando. Su comodidad os va a encantar, mientras que la respuesta en una gran versatilidad de terrenos va a hacer que sean elegidas para diferentes salidas. Con ellas hemos corrido sin problemas en más de una subida y muchas bajadas, ya que nos ofrecen una libertad de movimientos muy grande.

Unas zapatillas indicadas para aquellos corredores de peso medio o alto, que no tengan como principal objetivo la velocidad. Las Inov-8 RocFly G 390 ofrecen una excelente respuesta en todo tipo de terrenos y con ella podréis caminar tantos kilómetros como os plazca gracias a su extrema confortabilidad.

Las Inov-8 RocFly G 390 son unas zapatillas de fast-hiking ideales para aquellos que busquen un calzado para  salidas largas a ritmos de CA-CO y que vayan a encontrarse con diferentes  tipos de terreno. Sus 390 gramos de peso las convierten en unas zapatillas pesadas en comparación a las de correr, pero ligeras si lo hacemos con las botas de senderismo. Si no habéis tenido ningunas pueden parecer un rara avis, pero una vez os las calcéis  entenderéis por qué son tan útiles.

La extrema comodidad y confortabilidad son dos de las principales características que definen las Inov-8 RocFly G 390. Olvidaros de la rigidez de las típicas botas de senderismo, ya que con  este modelo es como andar con colchones en los pies. La comodidad nos permite entrenar por cualquier tipo de terreno, y disfrutar de ello sin preocuparnos de donde vamos a pisar. El drop de 6mm nos ayudará aún más a tener el control del terreno que pisamos.

Durante el test hemos ido con la misma comodidad y soltura por pistas forestales que por los senderos técnicos, sin importar si era de subida o de bajada. Este tipo de zapatillas acostumbran a tener cierta rigidez o dureza que les aporta resistencia, pero les resta comodidad. Nosotros hemos disfrutado de una gran variabilidad de terrenos sin problema alguno.

Sorprende la maleabilidad del upper. La primera impresión es que no nos aporta sujeción, ya que no encontramos ninguna parte rígida en el upper, pero no es así. A pesar de no tener ningún punto fijo de soporte, el upper nos ofrece sujeción en el tobillo. Cosa que hemos agradecido en terrenos técnicos o complejos.

¿Salidas largas o cortas? Poco importa ya que son tan cómodas que pasaran las horas y los kilómetros sin daros cuenta. Aquí es donde la famosa media suela G-FLY juega una posición relevante dado que es la encargada de que nuestros pies hayan gozado de una comodidad muy extrema, mientras que nos ha ofrecido retorno para andar a ritmos ágiles. Esto es algo que hemos notado desde la primera salida con las Inov-8 RocFly G 390.

Otro aspecto que nos ayuda a poderlas llevar durante varias horas es el upper que es extremadamente maleable. No tienen ningún punto de rigidez, pero eso no significa que no tengamos sujeción. En comparación con las Inov-8 TrailFly Ultra G 300 MAX el upper nos aporta más sujeción, ya que nos sujetan muy bien el tobillo. Esto puede parecer poco relevante, pero nos aporta una comodidad de movimientos en cualquier terreno que permite utilizarlas en salidas largas e incluso de varios días sin preocuparnos por el terreno que pisamos.

Las  Inov-8 RocFly G 390 nos presentan una suela de grafeno con tacos de 4mm de prominencia. La suela se encuentra dividida en dos grandes partes, y los tacos de la parte frontal tienen unas cavidades que permiten que los metatarsos se muevan con libertad, y la tracción al terreno sea mayor.

La suela ha sido fabricada con el compuesto GRAPHENE-GRIP™ que ya pudimos testear con las Inov-8 Trailfly Ultra G 300 con las que comparten suela. El agarre que nos han ofrecido en la mayoría de terrenos ha sido muy bueno. Al no ser unas zapatillas para ir a grandes velocidades, nos ha permitido pisar con firmeza por terrenos secos y húmedos. En nuestras salidas de CACO la suela nos ha ofrecido buena adherencia. Solo hemos tenido que pisar con cuidado cuando hemos tenido tramos de rocas húmedas o mojados después de lluvia. Allí hemos notado la falta de adherencia en las Inov-8 RocFly G 390.

Gracias al dibujo de la suela y flexibilidad de la media suela como también del upper, esto nos permite obtener una excelente tracción en una gran variedad de terrenos. En terrenos húmedos o descompuestos, es cuando más hemos apreciado la libertad que nos ofrecen las cavidades de la suela a nuestros metatarsos. En esos momentos es donde hemos podido transmitir la fuerza y el tacto de nuestros metatarsos al terreno, ganando adherencia.

Las Inov-8 RocFly G 390 son unas zapatillas de caña alta que nos permiten una libertad de movimientos muy elevada en la montaña. Os tenéis que olvidar de la típica bota de senderismo, donde en subidas o bajadas pronunciadas tenemos que luchar contra ella. La flexibilidad de las Inov-8 RocFly G 390 es muy elevada, y eso nos permite movernos con agilidad por cualquier tipo de terrenos ya sea en subidas extremas o bajadas directas. Os será casi imposible no lanzaros a correr en algún tramo de bajada gracias al dinamismo de la zapatilla.

¿Nos vamos a mojar los pies en terrenos mojados? Las Inov-8 RocFly G 390 no son unas zapatillas impermeables y no las podremos sumergir en ríos o charcos sin que nuestros pies queden mojados. El upper tiene cierta repelencia al agua y mucha transpirabilidad cosa que nos ha permitido que los pies se secan con rapidez cuando estamos en movimiento.

Después de casi dos meses testeando las Inov-8 RocFly G 390 no hemos podido apreciar ninguna zona que tenga un desgaste más rápido de lo esperado. Todo lo contrario, hemos podido comprobar que tenemos zapatillas para muchos kilómetros y muchas aventuras más. Es uno de los puntos fuertes de las Inov-8 RocFly G 390.

El grafeno que nos podemos encontrar en la media suela y la suela, también hemos comprobado que mantiene las prestaciones con el paso de los kilómetros. De momento llevamos unos 200 kilómetros recorridos con ellas, y seguimos manteniendo las mismas prestaciones que el primer día en cuanto a tracción, adherencia y amortiguación.