MAFATE

Una vez puestas en nuestro pie la primera sensación es la de flotar, la de andar en una nube. No en vano "One One" significa "volar" en una lengua africana. Es una sensación que no hemos tenido con ninguna otra zapatilla. ¡La sensación es bestial!. También hay que decir que, al principio, con ellas puestas nos encontramos un tanto extraños, incluso algo torpes.

Las Hoka One One Mafate son unas zapatillas espectaculares, fuera de todo lo establecido y que, sin duda, no dejan a nadie indiferente. Marcadas por una media suela extraordinariamente gruesa, que hacen que nada más verlas nos decidamos a cogerlas, a opinar y, si es posible, a probarlas. Y en eso estuvimos unas cuantas semanas.

Ya sobre el terreno su flexibilidad es más escasa, y es que flexar semejante suela no es tarea fácil. Suponemos que para paliar esta falta de flexibilidad las Mafate incorporan mucho "Rocket", o sea que la suela está muy doblada en la parte delantera, hacia arriba, para ayudar el despegue de la zapatilla respecto al suelo.
La amortiguación es sin duda a característica principal de la zapatilla. En la parte trasera, si apoyamos primero el talón, la media suela se engulle nuestra pisada, quedando totalmente amortiguada. Igualmente la suela se come literalmente todas las irregularidades del terreno, piedras gruesas incluidas. Realmente es como caminar sobre una nube. En la parte delantera esta sensación es bastante menor, aunque también sabemos que llevamos un grueso muy considerable de suela bajo nuestros pies.
A nuestro gusto el material amortigua muy bien pero devuelve poco la energía que amortigua, o sea, se recupera muy poco, no retorna a su postura inicial, no nos empuja de nuevo hacia arriba.
Lógicamente con una suela de tal envergadura la sensibilidad del terreno es muy baja. Tan solo en la puntera tenemos algo más de sensibilidad, pero sigue siendo escasa.

Las Hoka One One Mafate no incorporan ningún sistema que impida la entrada de elementos externos en el empeine, aunque tampoco creemos que los necesite, ya que la lengüeta cierra perfectamente.
La elevada suela ya constituye una buena protección para las Mafate. Además la puntera viene reforzada consistentemente. Otro pequeño refuerzo en los laterales, por la parte baja, cubre toda la zapatilla.

El sistema de atado es el de cordones tradicionales que funcionan perfectamente, corren bien y tensan a la perfección.
La sujeción del pie dentro de las Mafate es mejorable: al ser más anchas de lo normal hace que el pie quede apretado hacia abajo tan solo en la parte superior, mientras que en los laterales queda un poco de espacio, cosa que permite moverse el pie dentro de las zapatillas lateralmente.
Las Hoka One One son estables respecto al terreno. Aunque sean muy altas también se les ha dotado de una anchura mayor, cosa que las hace estables. El caso es que les faltan estabilidad respecto al pie.

Plantilla simple de la propia marca, con poco relieve, sencilla.
Los acabados son buenos, las costuras no se notan en absoluto y reina la sensación de comodidad y de flotabilidad. La lengüeta es estrecha pero muy cómoda, de piel sintética.

La parte superior (upper) transpira muy bien, con una tela muy aireada. En consecuencia su impermeabilidad es nula en esta parte más superior. Al ir tan elevadas del suelo es capaz de aguantar más el rocío, agua y humedad del terreno que otros modelos igual de impermeables.

Las suela de las Hoka One One Mafate es minimalista (lógicamente nos referimos a la parte que toca el suelo), con una capa muy fina. Unos tacos de mediana a baja envergadura, diseñados para propiciar el desplazamiento en la parte delantera y evitar el derrapaje en la parte trasera, cubren totalmente la superficie. Estos tacos están interrumpidos por unas bandas sin material, donde aparece directamente la media suela, y que tienen la función de ayudar a flexar la zapatilla. Como hemos comentado, las Mafate son bastante rígidas y se apoyan en estas armas para mejorar su flexibilidad.
Su agarre en tierra compacta es muy buena, donde traccionan bien. Nos llamó la atención que, al ser tan altas, la postura que adopta el pie respecto al terreno favorece mucho el avance en terrenos con mucha pendiente. En roca su agarre pierde un poco dado su poca adaptabilidad al relieve. En terrenos más grasos su agarre es más bien malo, debido a los tacos de baja prominencia. Cabe destacar, a su favor, que no forman nada de barro en su suela.
En general en terrenos húmedos pierden adherencia, pero están en la media de las demás zapatillas.
Son unas zapatillas que agarren mejor subiendo que bajando, todo y que son muy cómodas para los descensos, donde podemos dejarnos caer, apoyando todo nuestro peso sobre el talón ya que sabemos que vamos a ser amortiguados.

La durabilidad de estas zapatillas es medio o medio bajo: por un lado la suela es muy fina, por otro lado la media suela, al ser tan ancha, tiende a deformarse ligeramente. Otro punto a tener en cuenta es esta falta de sujeción lateral que hace sufrir también a la zapatilla.

Zapatillas poco conocidas en España y que hace ya algún tiempo tienen su público en países como Francia. Se las ha relacionado con carreras como la Ultra Trail del Mont Blanc, donde algunos corredores las calzaban.
En nuestra opinión deben mejorar la sujeción lateral, ya que a la que salimos de las pistas de tierra planas debemos esforzarnos algunas veces por llevar el pie en su sitio.
Centro de gravedad muy elevado no siempre compensado por la anchura extra de la suela.
Muy buena opción para todos aquellos corredores que necesiten una gran amortiguación, incluidos los corredores más pesados.
Mucho mejores para trails muy poco técnicos. Atención a la durabilidad.