AYRE

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Hoy nos toca analizar las botas de presoterapia Compex Ayre, las actuales ganadoras a los premios TRR elegidos por el público. Es decir, estas Compex Ayre han sido seleccionadas como las mejores botas de presoterapia por todos vosotros /as.

Muchas veces nos habéis escrito por privado para preguntarnos cuáles eran las principales diferencias entre las distintas botas de presoterapia que estamos probando en TRAILRUNNINGReview.

Hoy estamos ante una de esas botas “distintas” que ofrecen alternativas diferentes dentro de este mundo en crecimiento. En esta ocasión, las Compex Ayre se diferencian del resto por ser inalámbricas, de hecho, son las primeras y únicas que hemos probado.

Sinceramente, el echo de que sean inalámbricas, facilita mucho las cosas, son muy fáciles de poner y sacar, además te ahorras muchos cables y historias por el medio. También a la hora de almacenarlas en su bolsa, es muy fácil hacerlo.

Como ya hemos comentado en otros test de botas de presoterapia, la descripción de esta técnica es:

La presoterapia es una técnica de tratamiento en la que se aplica una fuerza mecánica para incrementar la presión de ciertos tejidos (venosa, arterial y del sistema linfático), generando la acción similar a un drenaje linfático, de esta manera se busca controlar problemas presentes en el sistema circulatorio.

Es decir, el uso frecuente de esta nueva técnica de recuperación nos podrá ayudar a la recuperación después de entrenamientos intensos en Trail Running.

En esta ocasión, la inexistencia de mangueras o tubos conectados al ordenador central, en esta ocasión va unido a las propias botas, permite una experiencia mucho más “libre” mientras recuperamos nuestras piernas tumbados en el sofá o en la cama y leemos, vemos el televisor o simplemente descansamos.

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Las Compex Ayre cuentan con dos petacas independientes situadas en cada una de las botas que programan y controlan todo su funcionamiento, así de sencillo.

Lo primero que debemos hacer es “enfundarnos” las botas. Este proceso es muy sencillo gracias a una cremallera que va hasta la altura de las rodillas y mediante 3 velcros elásticos conseguiremos ajustar la zona del isquiotibial y cuádriceps a nuestro gusto. La presión que podemos dar a estos velcros dependerá mucho de nuestro gusto, aunque nuestra recomendación es que no os paséis de presión, ya que os molestarán a la hora de activar los distintos programas.

Un detalle interesante para remarcar de estas Compex Ayre es la estructura y diseño de las botas.  Si observas bien, verás que en la rodilla queda un hueco o espacio libre para que la pierna tenga un mayor rango de flexión y al mismo tiempo, facilite la ventilación de esta durante el uso.

En el resto de las botas que hemos probado (al ser compactas desde los pies hasta la zona superior) nos ha sucedido que la pierna queda empapada del sudor debido a la nula ventilación.

Si nos centramos en la bota, cada una de ellas tiene un total de 4 cámaras de aire repartidas por toda su longitud.

Su compresión puede llegar hasta un máximo de 120mmHg lo cual, al menos según nuestro criterio, es más que suficiente. Sí que es cierto que la sensación es de menor presión que las otras botas de presoterapia que hemos probado.

Una vez puestas y ajustadas, podremos controlar los programas, el tiempo y la presión mediante los ordenadores que tenemos en los laterales. Los ordenadores requieren de cierto aprendizaje, no son los más intuitivos, así que tendremos que “pillar” el truquillo las primeras veces.

Compex Ayre: Dos programas

Una vez metidos dentro, volvemos a remarcar positivamente la facilidad de quita y pon de estas Compex Ayre, únicamente tendremos que sujetar durante un par de segundos el botón de encendido para que se activen los controladores. Evidentemente, deberás hacer el mismo gesto en ambas botas.

Detalle importante. Si quieres que vayan al mismo tiempo y que ambas actúen simultáneamente, deberás apretar el botón de inicio a la vez y pasará lo mismo, con la presión que fijes en cada cámara (si quieres que todas actúen igual).

Las botas Compex Ayre cuentan con dos únicos programas o modos de funcionamiento (F1,F2).

PROGRAMA 1 (F1): En esta ocasión, nos encontramos con un programa que va hinchando las 4 cámaras de manera progresiva. Desde la zona más distal (pies) a la zona más proximal cercana a los muslos. Una vez la presión llegue al nivel indicado previamente en cada cámara, saltará sucesivamente a la siguiente, así repitiendo el ciclo tantas veces se pueda durante el período de tiempo indicado. Una vez llegue a la cámara superior del muslo, se desinflarán las 4 a la vez. Nosotros el máximo tiempo de masaje que nos hemos dado ha sido de 30 minutos, aunque Compex te permite subirlo más tiempo.
La presión que queremos meter en cada cámara requerirá de paciencia, ya que, para modificarla, tendremos que sujetar el botón “set” y ajustar la presión subiendo más o menos individualmente sin tener unos displays de + o – en el controlador que lo faciliten.  La verdad fue que al principio nos costó mucho hacernos a ella.

PROGRAMA 2 (F2): En el programa 2, se activará la presión de forma simultánea en todas las cámaras (4). Este programa F2 es bastante más sencillo de programar ya que la presión que pongamos será la misma para todas las cámaras y nos quitará tiempo de programación.
Las botas tardarán unos 50 segundos en inflarse del todo, se mantendrán durante 5 segundos y luego se desinflarán durante unos 40 segundos.

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Seguro que muchos de vosotros/as estáis valorando adquirir unas botas de presoterapia para vuestros momentos de recuperación. Muchos estaréis valorando la opción de comprar unas botas como podrían ser estas Compex Ayre.

Somos muy conscientes de que estamos hablando de productos de un precio elevado, pero si estáis entrenando con volúmenes e intensidades altas, nosotros os lo recomendamos. Esto no quiere decir que estas botas de presoterapia sean milagrosas, pero sí que serán un buen complemento para nuestra recuperación.

El nuevo Compex Ayre ha sido un dispositivo que nosotros hemos utilizado a diario, durante dos semanas previas y una post a un medio maratón de asfalto.

La verdad es que cuando más hemos notado que era un auténtico masaje ha sido justo después de entrenamientos verdaderamente intensos y evidentemente, durante las horas posteriores a la carrera (que por cierto salió muy bien).

Si haces deporte diariamente, sobre todo aquellos en los que el tronco inferior trabaja mucho (ciclismo o trailrunning por ejemplo), utilizar una máquina de estas solo puede aportarte cosas positivas.

Su facilidad de transporte con el maletín que te regalan con el producto, el fácil quita y pon que tienen en las piernas, y el no tener ni tubos ni mangueras de por medio es lo que más nos ha gustado de la Compex Ayre. Esto último es lo que más diferencia a estas botas del resto de marcas.

Lo que nos hubiera gustado habría sido una mejor facilidad de uso. La verdad es que tener los controladores en la parte lateral está muy bien, pero cuadrar las 4 cámaras de cada una de las piernas con la presión correcta, más cuadrar los tiempos, más encenderlo todo al mismo tiempo, nos fue un poco costoso.

De hecho, esta es la bota de presoterapia que más tiempo hemos tenido que emplear antes de darle uso con tal de programar correctamente sus ajustes.

Seguramente utilizar una pantalla más grande y poniendo unos displays de + o – nos habría ayudado un poco más.

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

Desde nuestro punto de vista, el uso debe ser proporcional a la carga de entrenamiento. Es decir, en momentos de la temporada donde nuestros entrenamientos son más intensos o más prolongados, sacaremos el mejor partido a estas botas de presoterapia Compex Ayre. También debemos reconocer que las botas de presoterapia, en ningún caso, evita la visita a un fisioterapeuta para nuestros tratamientos regulares. 

Compex Ayre: Muy fáciles de usar

La autonomía de estas Compex Ayre es, aproximadamente, de unas 3 horas sin necesidad de recargar la batería en ningún momento. Obviamente, esto no dará batería suficiente como para poder llevarnos estas botas de presoterapia a una carrera o un fin de semana de entrenamientos intensivos.

Por otro lado, y seguramente uno de los puntos fuertes de estas Compex Ayre, es la capacidad de guardar de manera muy fácil, la más fácil de todas las que hemos probado, y ponerla en su maletín para poderla transportar donde queramos.