LONG TIGHTS COLDEN

o primero que destaca cuando ves estas mallas por primera vez es la combinación de colores que Buff le ha dado, siguiendo esa línea más arriesgada que esta marca suele imprimir a sus modelos. No entraremos en si es acertado o no porque eso depende de cada uno pero sí que podemos decir que son diferentes a la mayoría, donde predominan los negros. La verdad es que hemos notado que la gente con la que te cruzas no suele poder evitar echar un vistazo. Realmente destacan.

Una vez puestas, notamos es que son realmente muy ajustadas. Se adaptan perfectamente a nuestro cuerpo y, aunque no llegan a ser realmente compresivas, notamos una ligera presión que da una sensación de sujeción bastante buena.

Desde Igualada, la marca Buff, especialista en todo tipo de textil para la práctica de deportes al aire libre, nos proponen unas nuevas mallas largas para nuestras salidas por la montaña: Las Buff Colden.

La elasticidad es más que correcta pero no es lo más destacable. La sensación de presión que comentábamos antes penaliza un poco en este sentido. De todos modos, La Buff Colden es lo suficientemente elástica para que no notemos tiranteces.
Estas mallas presentan, además, unas cremalleras a la altura de los tobillos, cuyo carro queda fijo, que ayuda a la hora de ponerse o quitarse unas mallas tan ajustadas como estas. Además, en la parte interior de los tobillos presenta una tira de silicona que evita que la malla se suba o se gire de algún modo durante la carrera.

La cintura tiene una anchura de un dedo y en su interior presenta una goma para acabar de ajustar las mallas y evitar su desplazamiento. Hemos notado que estas mallas tienen una ligera tendencia a caer con lo que habrá que tener especial cuidado y asegurarse que están bien fijadas.

El tejido X-DCS, además de evitar que se nos pegue a la piel, dota el interior de mucha suavidad y hace que las Buff Colden nos proporcionen una sensación de calidez muy buena que nos mantiene a una buena temperatura incluso en días fríos.

Además de cálidas, las Buff Colden permiten una buena transpiración. Para ello, los laterales de los muslos y la parte trasera de las rodillas están confeccionadas de un tejido mucho más transpirable que ayuda a una ventilación óptima de la zona y, en el caso de la parte anterior de las rodillas, a evitar rozaduras.

En su parte posterior presenta un pequeño bolsillo cerrado con cremallera. No es muy grande. Lo justo para guardar un dispositivo electrónico, unas llaves y poco más. Como opinión personal consideramos que es la opción más acertada ya que cargar las mallas con algo pesado acaba convirtiéndose en algo incómodo con el paso de los kilómetros sobre todo si el objeto va rebotando. Si guardamos algún dispositivo electrónico es conveniente protegerlo de algún modo ya que el bolsillo no lo aislará de nuestro propio sudor, pudiendo mojarse.
Las mallas Buff Colden presentan elementos reflectantes prácticamente en los 360º. En la parte frontal, en el muslo izquierdo, el logo de la marca permite que seamos vistos cuando corramos de noche por zonas oscuras. En los laterales, el tejido más microagujereado de color amarillo presenta costuras reflectantes que van girando hasta la parte trasera de la rodilla. Por último, las cremalleras a la altura de los tobillos, presentan unas tiras reflectantes con la misma finalidad.

Buff ha creado unas mallas que presentan una gran resistencia a las abrasiones que se puedan producir con ramas y después de bastantes lavados mantiene su capacidad térmica y transpirabilidad como el primer día. El logo reflectante en el muslo izquierdo se ve ligeramente deteriorado en lo que suele ser habitual en este tipo de elementos en casi todas las marcas.

Las Buff Colden son unas mallas largas diseñadas para esos días fríos en los que necesitemos un extra de protección sin renunciar a una buena transpirabilidad, ya que lo tienen bastante bien resuelto con los laterales más agujereados y la parte trasera de las rodillas.
Consideramos que son más recomendables para entrenos que para competición, sobre todo cortas y rápidas, ya que la sensación de presión y el tejido con capacidad térmica hace que reste un poco en la elasticidad y la sensación de ligereza.
No aptas para aquellos que quieran pasar desapercibidos.