GALERÍA
CONCLUSIONES
Transportabilidad
Son barritas grandes, eso se ve a simple vista, pero como podéis observar en las fotos, todas las barritas de gama “endurance” de otras marcas tienen un tamaño similar. Si nos fijamos en el peso de las barritas de la foto tenemos la 226ERS Endurance Fuel Bar (con sus 60 gramos), una de 85 gramos y todas las demás de 40 g.
La que analizamos tiene por tanto un peso intermedio y sin embargo no ocupa mucho más que una de 40 gramos. Ligeramente más gruesa que las que tienen la misma longitud, pero eso no nos suele quitar espacio (es más probable que algo no nos quepa en un bolsillo por su longitud que por su anchura).
El caso es que considerando el objetivo de las barritas tipo “endurance”, tampoco podemos decir que el tamaño sea un contra. Están pensadas para ser consumidas en actividades de larga duración o un tiempo antes de éstas, por lo que se asume que el deportista cuenta con algún tipo de elemento para llevar agua y provisiones (mochila, cinturón).
En nuestra mochila de 5 litros las hemos conseguido meter en los bolsillos más pequeños pero forzando la barrita, que quedaba a presión dentro del bolsillo (ver foto).
Esto nos ha hecho ver que dentro de su consistencia, son algo moldeables (tampoco en exceso). Lo justo para poder apretarlas en un bolsillo sin que se rompan. Ojo, ¡esto es importante! Estar en carrera, abrir una barrita y que esté rota o troceada puede llegar a ser un problema si se nos caen los trocitos al abrirla, ¡ya no te cuento si hace frío y vamos con guantes!
Lo ideal es que la barrita se mantenga entera aunque se caiga al suelo o se aplaste un poco y, durante nuestras salidas, la 226ERS Endurance Fuel Bar ha pasado esa prueba.
En los cinturones (siempre son algo elásticos) caben varias sin problema. De los bolsillos que hemos probado se nos ha quedado un trozo por fuera en el típico bolsillo interior de los pantalones ligeros cortitos de correr (los de toda la vida, ver en la foto). Estos bolsillos suelen estar para poder meter unas llaves (y ya) y la 226ERS Endurance Fuel Bar es demasiado larga. Por poder, se puede llevar, no se va a caer, pero ahí ya cada uno con la (in)comodidad que le suponga.
Introducción
226ERS es una marca española de nutrición deportiva creada por deportistas y enfocada a deportes de fondo.
El origen de su nombre no podría ser más motivador: el total de km que tiene un ironman si sumas las 3 disciplinas (3.8km de natación + 180,2km de bici + 42.195km de carrera).
Han caído en nuestras manos sus barritas energéticas “endurance”, las 226ERS Endurance Fuel Bars, elaboradas con ingredientes naturales, frutas secas (sobre todo dátiles e higos) y almendras, además de un complejo vitamínico bastante completo.
Como línea general buscan que sus productos sean lo más naturales posibles, intentando evitar sustancias químicas y usando ingredientes y aromas naturales para crear sabores reconocibles. Ninguno de sus productos tiene gluten y los preparados en polvo son bajos en azúcar.
El carbohidrato principal de sus productos es la amilopectina, un CH de baja osmolaridad que facilita la digestión incluso en situaciones de calor y esfuerzo.
La gama 226ERS Endurance Fuel Bar tiene 6 opciones de sabores:
- Limón & Chips de chocolate
- Fresa & Chocolate blanco
- Manzana & canela
- Mocaccino (Café & Chips de chocolate)
- Chocolate
- Banana + BCAAs
¿Podéis elegir solo una 226ERS Endurance Fuel Bar? A nosotros nos cuesta… 226ERS ha creado una gama para todos los gustos, seguro que hay algún sabor con el que te sientes más identificado ¡Por nuestra parte estamos deseando pegarles un mordisco a todas!
REVIEW
Toma
Toma
Lo que más nos ha sorprendido de las 226ERS Endurance Fuel Bar es su facilidad para masticarla y tragarla.
Al coger una barrita en la mano y ver el tamaño y los 60 gramos por unidad piensas: “UF, ¿cuándo voy a comerme esto?”
No tienes más que probarlas para cambiar de pregunta: “UY, ¿Ya me la he acabado?” jajaja.
Si necesitamos ingerir el total de calorías y nutrientes que nos aporta la 226ERS Endurance Fuel Bar (aprox. 200 kcal cada barrita de 60 g, con unos 30 g de azúcares), podemos asegurar que no es una barrita que cueste mucho tiempo acabar: porque no es pesado masticarla y ¡porque están bien ricas! (y vale que somos golosos, pero también exigentes ;) )
Viendo que sus ingredientes principales son dátiles, higos y pasas, pensábamos que se nos iban a quedar pegadas en las muelas o que íbamos a estar un buen rato masticando antes de poder tragar, sin embargo son más fáciles de masticar que muchas otras que hemos probado con cereales o con frutos secos más duros (avena, almendras, nueces, etc.) y además, no pringan en las manos.
Al morder te das cuenta que lo que parecía una masa dura y consistente, se trocea casi sola en la boca, ahorrándote a ti mucho del trabajo y saliva.
Su moldeabilidad es buena en cuanto a que no son barritas rígidas, como las que se partan en mil pedazos al golpearse, ni tan compactas como parece cuando las palpamos a través del envase. 226ERS ha conseguido unir los ingredientes en una masa firme pero que al llegar a la boca y empezar a masticar, parece que se descompone en trocitos para que tú acabes el trabajo.
No son nada secas y no sientes que absorba toda la saliva de la boca, cosa que se agradece cuando hacemos deporte, que tendemos a tener la boca seca y lo último que quieres es tener una pasta dando vueltas en la boca.
Sí hay que tener en cuenta que no tienen la misma textura a distintas temperaturas. A altas temperaturas (por el ambiente o por llevarlas pegadas al cuerpo) son mucho más blandas y moldeables y cuesta aún menos masticarlas. Si las tomamos frías (las hemos tenido también en el frigorífico), serán más duras y esa sensación de ‘deshacerse en la boca’ no es tan evidente.
En cuanto al sabor, el calor lo intensifica mucho más, al igual que el aroma que desprenden. Es más, en una de nuestras salidas, teníamos a medias una de Fresa & Chocolate blanco y otra de Limón & Chips de chocolate y la de limón, al volver a abrirla nos ha transmitido un olor tan intenso que parecía casi alcoholizado. Seguía estando buena y en perfectas condiciones, pero destacó en este sentido frente a la de Fresa.
Aprovechamos a comentar que estas dos versiones con chips de chocolate, aún estando calientes, no pringan ni se deshacen. Los trocitos están mezcladas en la composición de la barrita y no de forma exterior.
Hemos probado 4 de sus versiones y en todas destaca bastante el sabor a higos/dátiles (a fin de cuentas son sus principales ingredientes). Si analizamos brevemente cada una:
* Limón & Chips de chocolate: el sabor y aroma a limón es embriagador (¡el 31% de la barrita es limón confitado!). El chocolate negro apenas se nota aunque creemos distinguir un pequeño toque que, en conjunto con el limón, nos recuerda a una fruta escarchada. Tiene pequeños trozos de almendra que se ven a simple vista.
* Fresa & Chocolate blanco: no tiene un sabor a fresa muy potente pero sí un buen aroma que la hacen muy apetecible. Los trocitos de chocolate blanco se ven perfectamente y son relativamente grandes pero luego no nos han sabido absolutamente a nada.
* Manzana & canela: de estas 4, es la única que no tiene higos. El aroma a canela (si te gusta) es fantástico, aunque luego el sabor no es tan fuerte. Es un sabor muy dulzón, así que será mejor tomarla al principio a cuando ya estemos cansados de dulce.
* Mocaccino (Café & Chips de chocolate): destaca que tiene un 2,5% de café natural, aunque no especifica que tenga cafeína. Su aroma a café es agradable y el sabor es muy suave, con un pequeño regustillo amargo. Si eres un amante del café fuerte no esperes un sabor tan intenso, pero quizá sí lo justo para animarte con el aroma y su toque suave.
Ninguno de ellos es excesivamente fuerte ni pesado, lo que facilita su deglución y digestión.
Además, nos ha faltado probar los otros 2 sabores de la gama: el de Chocolate y el de Banana (una pena para golosos como nosotros… :) )
Rendimiento
Rendimiento
El objetivo de estas barritas es el aporte de energía duradera, destinada a los momentos menos intensos pero más largos en el tiempo. No sería la ingesta elegida si necesitamos un impacto rápido de energía, sino cuando sabemos que aún vamos a estar varias horas activos. Por este motivo también podemos consumirlo antes del ejercicio, por ejemplo como desayuno o merienda ágil si no vamos a tener tiempo de sentarnos y digerirlo antes de empezar a movernos.
Son barritas grandes (60 gramos) por lo que estando en carrera, según nuestras necesidades y capacidad de digestión, es posible que no queramos consumirla de una sola vez. Si se da este caso, podemos aprovechar la calidad del envoltorio para guardarla. Nosotros lo hemos hecho y el envoltorio aguanta perfectamente y conserva bastante bien la barrita durante varios días aunque ya no esté herméticamente cerrada.
Los ingredientes de las 226ERS Endurance Fuel Bar nos aseguran un efecto saciante al rato de haberlas consumido, aunque su facilidad para masticar y tragar puede hacernos pensar lo contrario. Si comemos con la cabeza en vez de con el paladar (si algo te gusta siempre vas a querer un mordisco más…:p) comprobaremos que nos sacian y nos mantienen activos.
Está elaborada principalmente con frutas y almendras, ingredientes naturales, sin gluten y con distintos tipos de hidratos de carbono, lo que facilitará la digestión y su mayor absorción.
Todas las versiones de las 226ERS Endurance Fuel Bar llevan vitamina C, B1, B2, B3, B5, B6, B9, B12 y E (superando en una sola barrita el 50% de las supuestas cantidades diarias recomendadas) y la de Banana lleva además BCAA’s, pero ninguna lleva cafeína.
Conclusión
Conclusión
Podemos decir que quedamos muy satisfechos con las barritas energéticas de 226ERS.
Lo que más nos gusta es la calidad de su composición, siempre por encima del 85% con ingredientes naturales (el resto lo componen el complejo vitamínico, aromas y emulgentes y conservantes que hemos comprobado que están catalogados como inofensivos).
Sabiendo que podemos confiar en la calidad de los ingredientes de la 226ERS Endurance Fuel Bar, lo siguiente más importante es que no hemos tenido dificultades para masticarlas y digerirlas en carrera (siempre masticando bien y acompañando con líquido).
Su objetivo es darnos energía duradera, liberada poco a poco (no son sustitutas de un gel, que debe proporcionar energía lo más rápidamente posible). Su uso ideal es durante esfuerzos no muy intensos pero sí largos en el tiempo o bien antes de realizar el esfuerzo, como aporte extra de energía y de fácil digestión.
Con sabores muy distintos, desde lo más dulce (canela) a lo relativamente ácido (el limón está confitado y no es ácido pero es un sabor más fresco que otros) y llegando al recuerdo amargo del café, se aseguran que todo el mundo pueda hacer su elección y tener un sabor que realmente le guste (cuidado que enganchan, jejeje).
Su tamaño/peso está dentro de la media de otras barritas "endurance" del mercado, pero sigue siendo grande para muchos corredores, que dividirán la toma en carrera. Vender “barritas dobles”, de 30 gramos cada una, podría ser ideal.
Al no tener cafeína ni estimulantes, podemos tomarlas bajo demanda de nuestro cuerpo, sin necesidad de ir haciendo cálculos complejos (sin olvidarnos del sentido común).
Y aunque sabemos que poner el precio como punto negativo puede ser polémico, lo vamos a poner como contra. Cada 226ERS Endurance Fuel Bar cuesta 2.5€, precio que consideramos elevado si somos consumidores habituales de estos productos tanto entrenando como en competición.
Son barritas de calidad, con un gran aporte de vitaminas (¡podríamos decir que casi ninguna barrita tiene!) y esto tiene un coste justificado, pero quizá no al alcance de muchos presupuestos. Si es el caso, podrían ser un gran producto que reserváramos para la competición, donde debemos confiar en lo que ingerimos y en no tener imprevistos digestivos.
PROS
+ >85% son ingredientes naturales
+ Fáciles de masticar y digerir
+ Enriquecidas con vitaminas
+ Sabores para todos los gustos
+ Sin gluten
CONTRAS
- Tamaño grande para algunos bolsillos
- Con ‘chip’ de chocolate: no se aprecia sabor a chocolate
- Los ‘chip’ de chocolate: aportan grasa (menos digerible)
- Precio a considerar
COMPARADOR
Vs.
Autor: Irene
Fecha de publicación: 03/09/2016